ATENA (Borrador) Todo por el poder (1)

Benvenuta

Kyra

No.

Fue lo primero que le dije a papá cuando me ofreció un puesto más alto en la organización un rotundo NO , estaba cansada de ésto, el solo pensar lo que paso la última vez que estuve al frente- me estremecí.

Después de un mes insistiendo en qué al menos estaría cerca, me liberaron de ese tormento que llamó hogar.

Estaba con una mochila colgada en mi espalda y mis botas negras hasta los tobillos bien puestas en el pavimento a punto de cruzar a Atena of College, el instituto más prestigioso aquí en Italia conocido por tener a hijos de personas adineradas y de buen porté que le den buena imagen a la institución.

Una institución pulcra y de la mejor educación para gente importante. Las puertas eran de madera antigua, como un castillo que si mi memoria no me falla así era en esos tiempos. Demasiado espacio en todo el patio; mesas y sombrillas blancas en tul con unas sillas de hierro bañado en pintura blanca con formas artesanales. Flores blancas y de distintos colores claros en algunos espacios, estatuas de dioses del Olimpo como la gran Atenea en el medio con su lanza y su escudo.

Tenía mucho que decir de esa mujer. Una gran guerrera ¿ a costo de que ? mato a Medusa que solo era una víctima.

La escuela solo podías entrar si eras de familia importante o de gran prestigio, y si eras becada como yo tendrías que esforzarte el doble además de no tener un registro que manchara tus papeles, por eso mismo tuve que cambiar todo mi nombre y el de mis padres que al parecer ahora están muertos, no podía entrar con un currículum como el mío, se les caería los ojos literalmente a toda la dirección estudiantil.

Cruzando las barras y a un guardia vi como pasaban chicos y chicas vestidos con el uniforme falda negra, pantalón y chaleco del mismo color con una camiseta blanca con el logo de la escuela unas hojas al rededor de un escudo y un casco griego con unas flechas cruzadas. La mayoría lo combinaba con accesorios o otras prendas del mismo color.

-¡Cuidado!- grito una persona.

Una chica de mi edad con un audi blanco del año, casi me atropella el primer día. Genial ¿qué le diré a mis padres?

-Oye que ya casi te atropello-sale de su auto mal estacionado con su pelo marrón oscuro y una sonrisa de oreja a oreja-. Eres nueva, ¿no?- señala el letrero blanco de atrás- dice nuevo estacionamiento.

-No, no lo he visto, disculpa.

-No importa, ten cuidado para la próxima, todos aquí no les importa quien pase y quién no-su voz sonó rencorosa de alguna manera, como si ya le hubiera pasado.

-Gracias.

-¿No eres de aquí cierto?- me pregunta mientras comienza a limpiar su auto, seguro notó que no tengo el acento.

-No, soy de las afueras de California- pequeña mentira.

-Ah, eso tiene sentido, entonces ven conmigo que te enseño la dirección, no te preocupes la mayoría no son de aquí yo soy de New York.

-Eso es genial- aún qué eso ya lo sabía, su asentó era igual a la de las personas de ahí.

Prácticamente nací en New York. Y la mayor parte de mi vida me crié ahí. Por suerte no tenía un acento, pero podía fingir uno sin problemas.

Dude si en ir o no, pero supongo que necesitare amigos en este lugar.

Lealtà e amicizia vanno sempre di pari passo se l'una manca l'altra non funziona, decía Papá .

-Soy Mysie Accorsa ¿tú?

Mysie Accorsa hija de Fede Accorsa claro, dueño de los Restaurantes Accorsa en Nueva Zelanda y New York, aún más prestigiosos en estos lados, incluso a mi familia le gustaba ir de vez en cuando.