¿Que me has hecho? - Bloody Painter-

22. Herido

- Oh vamos, por qué tenía que pasar esto justo hoy -

Es la tercera vez que me encuentro despertando durante la misma noche, los recuerdos se acoplan en mi mente y forman una masa heterogénea de emociones dirigidas hacia mi atacante y hacía el chico que me ayudó. Sin embargo este último sueño se sintió casi tan real como lo es la cama en la que me hallo acostada.

- Gracias -

- De verdad no me recuerdas -

- Por que lo dices? Quien eres? - Intentaba hacer contacto visual con la persona ubicada en frente de mi, pero la veía borrosa

- Vamos, mira por la ventana y lo recordarás -

En las noticias locales no se ha hablado a grandes rasgos acerca de agresores que ronden por el sector, pese a esto he tomado como decisión no salir por las noches si no es necesario, también he aprendido la lección de nunca dejar las ventanas sin seguro. No tengo ni la más mínima idea de si esto debería llamarse pesadilla, todo lo que pude recordar era a una persona que insistía en que viera por la ventana, y fue tan vívido que cada palabra pronunciada aún causaba escalofríos en mi piel y retumbaba en mis oídos.

- Mierda - me levanté de golpe y me sentí mareada - Es solo un sueño TN - me hablaba a mi misma, pero no era del todo cierto, verdad? Y similar a una ampolleta encendiéndose, se me iluminó el cerebro, podría ser posible que la misma persona que me ayudó fuera la que días anteriores ví en la casa de enfrente? - Diablos, claro que si! - grite más de lo que tenía planeado

La máscara, ni idea de que tan idéntica era, pero estoy segura que era la misma persona - Es un ladrón - llevé ambas manos hacia mi boca intentando retener el temblor de mis labios, pero me fue imposible. Un ladrón me salvó y yo le agradecí, y no solo eso, sino que además le mostré en dónde vivía

- Eres una idiota TN - Espero no volver a toparme con esa persona en mi vida. Dicho esto ví la hora en mi reloj de velador;

03.00 AM

Genial pensé, tres de la madrugada y el volver a dormir era una idea bastante lejana, mis pensamientos perdían consistencia de la realidad y lo que era la sombra de los árboles asomándose por la ventana, podría asegurar que correspondían a las manos de alguien intentando colarse por esta misma y que la ropa amontonada en la silla de mi escritorio era alguien sentado esperando que me moviera para atacar - ¿Sabes qué no ayudas? - le hablaba a mi cerebro intentando no asustarme más de lo que ya lo estaba.

Di tres pasos y encendí mi lámpara de noche, cobarde pero inteligente, sin oscuridad, esas ideas en mi cabeza se disiparian, claramente no podría borrar la posibilidad de asomarme a la ventana y ver a ese tipo, pero algo es algo. Asómate, no hay nada - Pero, y sí si? - No, es de noche y no se oye ni un alma - Está bien -

- Tranquila TN, es ir, mirar por la ventana y volver a dormir, tu puedes. - Si como no, igual que cuando fuiste a cerrar las cortinas y se te apareció el idiota de la máscara - De verdad que no sirvo para dar ánimos, vamos TN, mente en blanco -

Lo siguiente que ocurrió fue exactamente lo que segundos antes me temía, al otro lado de los cristales de mi ventana se visualizaba una persona en el suelo, inmóvil. Tomé mi teléfono y marque a emergencias con la mayor precisión según mis dedos temblorosos lo permitieron, comenzó a sonar y me pareció una eternidad antes de que al fin contestaran la llamada

- Hola, usted marcó a emergencias, puede decirme cuál es su emergencia?

- Si....hay...hay alguien tirado en frente de mi casa -

- Okey, necesito que se calme, yo estoy con usted, dígame la dirección de dónde se encuentra -

- Claro, es, es... -