CAP. 28

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- ARRIBA, PEREZOSOS, HAY MUCHO QUE HACER HOY.

- Ely, no grites, Leidy dijo que no lo hicieras.

- Bueno, pero ya les he hablado bajito y con cuidado y ÉSTOS DOS MENSOS NO SE LEVANTAN AÚN ¡ARRIBA!

El agarre a mí cintura se intensificó mientras un gruñido se escapaba de los labios del rizado. Abrí mis ojos y me encontré con las dos ojinegras revoltosas.

- ¡Afuera! - gruño Emilio.

- Oh, Emilio, nosotras también te extrañamos. - dijo la pelinegra, fingiendo limpiar sus lágrimas inexistentes.

- ¿Si saben que soy su futuro líder, no? - impuso. - no pueden venir a mí cuarto y hacer cómo si yo fuera uno más de ustedes.

Oh, oh. El alfa no se levantaba de muy buen humor ¿Y quién lo haría si vienen a gritarte cómo si nada?

- Uhm... Digamos que aún no eres el líder. - dijo Ale.

- Y además, eres igual de idiota que nosotras. - siguió Elyzabeth, haciéndome soltar una carcajada.

- ¿Porqué te estás riendo tú, Huh? - se quejó el rizado, atrayéndome más a su cuerpo.

- Me he reído de un chiste que recordé. - me excusé intentando sonar lo más inocente posible.

- Uh... CUENTA EL CHISTE, CUÉNTALO. - habló con emoción la enana estúpida, la cual me estaba sentenciando a la muerte.. Okey, no tan dramático.

- Si, Daniels. Cuéntanos. - secundó burlón el tonto alfa.

La puerta se abrió, interrumpiendo la conversación, era la pelinegra, quién venía con un semblante algo serio. Emanaba preocupación y algo de temor. Por supuesto que todos lo sentimos, Emilio fué el que habló.

- ¿Que sucede, Leidy?

- Encontraron tu auto a las afueras del territorio del clan. - dijo sin rodeos. - el olor que quedó impregnado en él era de un alfa.

- ¿Saben quién es? - preguntó poniéndose tenso y haciendo que nuestros omegas se encogieran.

- No, pero harán todas las investigaciones necesarias. Deben sacar las huellas dactilares, aunque no sé muy bien si las ha dejado, quién sea que hizo ésto, venía preparado.

- Iré al área de investigación en unos minutos. - dicho ésto, la pelinegra se fué junto con su Omega y la ojimarron siguiéndola por detrás.

¿Si descubrían que fué mi padre el que hizo ésto, que es lo que pasaría?

Tenía el tiempo jodidamente contado, no podía esperar más.

- E-emilio.. - llamé temeroso.

- ¿Qué ocurre, pequeño?

- Y-yo.. debo decirte algo.

- Cariño, lo hablaremos luego. - besó mí frente y se urgió para luego irse al baño.

Mordiendo mí labio inferior me alenté en seguirlo, con mis piernas temblando de los nervios que estaban carcomiéndome por dentro, llegué hasta la puerta del baño, la cuál estaba cerrada.

El sonido de la ducha se escuchaba del otro lado, mí lobo interno chillaba, diciéndome que no entre y no abra la boca, no era estúpido, sabía el riesgo que correría, pero sería aún peor si se entera de otra manera, por boca de terceros.

Debía hacerlo.

Abrí la puerta con cuidado y entré al pequeño cuarto, encontrándome con el cuerpo del alfa dándome la espalda.

I'm Yours, Alfa // Adaptación Emiliaco OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora