Extra 3

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Nota:No quería hacer tantos extras. Asi que esto es de él capítulo 29

Los murciélagos estaban por entrar. Hawkins está en peligro.

Si ellos entran, atacarán a muchas familias y niños. Y los primeros en sufrir serían Abby y Dustin.
No puedo permitirlo.

—Eddie ¿Que estas haciendo?

—¡Eddie, sube ya!

Tome un escudo y la lanza. Se que será algo estúpido pero también ganaremos tiempo. Mire a Abby antes de salir.

—Te dije que te iba a proteger.

Sali a toda prisa y tome una bicicleta.
Pedale lo más rápido posible.
Mi plan iba bien. Los murciélagos iban detrás de mi.

—¡VENGAN POR MI, HIJOS DE SU PERRA MADREEEEE!

Mis piernas ya se estaban cansando y no paré hasta que una de esas criaturas me alcanzó y me hizo caer.
La única opción que me convenía era correr quise hacer.

"Eres más valiente de lo que crees, Eddie"

Frene en seco, recordando aquellas palabras de By.

"No supe que hacer así que... salí corriendo"

No. Ya no más.

No seguiré huyendo. No puedo estar así por el resto de mi vida. No quiero sentirme como un maldito cobarde.

Entonces me gire lentamente y muy decidido. Tome el escudo y la lanza. Con el escudo me protegí de ellos que venían a mi.
Estos me rodearon de inmediato y yo me defendía con mis dos armas. Golpeé varias de esas cosas, se sentía bien no huir más.

—¡Vamos!

Seguí golpendo uno que otro animal que se iba acercando.
Unos de ellos me tomo del cuello con su larga cola.
No pude defenderme.
Caí al suelo completamente.
Otros murciélagos me tomaron de las manos y pies.

Estoy perdido. No sabía que hacer.
La única solución es que maten a Vecna cuanto antes.
Sentí sus mordidas en mis costillas.
Dolía como el carajo.
Otros me mordieron en otras partes del cuerpo.
Ya no podía luchar. Estaba totalmente perdido...

Hasta que los murciélagos cayeron.
Pero no podía levantarme.
Abby llegó corriendo hacia mi.

—Muy mal, eh—trate de sonar lo mejor posible pero no pude.

—Levántate, tenemos que ir al hospital–ordenó.

–Okey.

Ella trató de levantarme. Pero mi cuerpo no podía reaccionar. Estoy muy débil como para mantenerme de pie y eso era muy malo.

—Espera, un segundo, un segundo–me deje caer.

No creo poder seguir. Se que mi camino acaba desde aquí.
Mire a Abby a los ojos y le sonreí por última vez.

—Esta vez fui valiente ¿verdad?

—¿Que?

Dustin llegó hacia nosotros y también estaba herido.

—No quería que esto pasara—dije.

—Iremos al hospital y estarás bien—su mano acaricio suavemente mi mejilla. Se sentía bien.
De verdad que no quiero dejarla sola

—Lo dudo mucho...

Sus lágrimas caían sobre mi cuello .Ella negaba desesperada.

—No, Eddie... lo prometiste.

—Lo-lo siento—Ella me abrazo. Y yo acaricie su hermoso cabello castaño por ultima vez—, de verdad que lo siento–susurré.

Me siento afortunado de haberla echo parte de mi vida. Fue una gran amiga y mi gran amor de niñez y de la adolescencia.
Mi amor en ella nunca acabo y por un momento quería que fuera así para siempre.

Mis ojos se fueron cerrando poco a poco. Y aún que trate de mantenerme despierto, no pude.
Pero al menos nos despedimos.
Me sentía en la soledad. En la oscuridad.
Ya no podre escuchar su hermosa voz de nuevo. Y tampoco podré admirar esos lindos ojos azul cielo que tiene.

Este fue mi fin.

No me pude graduar junto con ella. No habrá más salidas de pesca con mi tío, que para mi el es un padre que nunca tuve.

Todo era oscuridad por un segundo, fue como un abrir y cerrar de ojos.

Abby ya no estaba aquí, ni Dustin.

¿Que había pasado?¿Por qué se fue tan pronto?

Las nubes negras del lugar estaban saliendo por los grandes portales extendidos.

Mi cuerpo se sentía cansado. Apenas y pude levantarme.
Camine hacia el portal donde iniciaba desde mi caravana.

El sol apenas se está ocultando. O más bien la nube obscura lo está tapando.
Pero aún así, mis ojos me dolían por la luz.

Pude ir hasta mi cuarto medio destruido. Ya tenía planeado que hacer.
No puedo quedarme en un pueblo donde me toman de asesino.

Agarre mis ahorros que los dejé bien guardados.

Vague por el bosque hasta llegar a la carretera.
Muchos autos pasaban pero me ignoraban. Parecía que estaban huyendo.

Uno se animo a pararse cuando extendí mi dedo pulgar.

—¿Podría llevarme a esta dirección?—le di el papel donde vivian aquellas personas que me ayudarían. El hombre me miró toda la sangre en mi ropa—le daré todo esto que tengo.

Le enseñe todo el dinero que tenia.
Pareció convencerle. Me subí a su auto y manejo hasta llegar a aquel lugar.
Necesito a Abby pero más necesito recuperarme. Mi cuerpo arde por las heridas.

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Capitulo corregido.

Ya ahora si es el final

Ya es un hecho que Eddie esta ¡vivooooo!

Así que ya me pondré a trabajar el segundo libro.

El viernes avisaré como se llama y todo.

Gracias por el apoyo

The fault in love-Eddie Munson #1 [✓] CORREGIDA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora