SU CASA 10

1.7K 106 5
                                    

Siento la puerta de la habitación, abrirse en eso, lo veo con ropa deportiva, una camiseta que se pega a su trabajado cuerpo, me observa y dice—, una foto, te duraría más, pero ya que estamos que puedes tocarme y así dejas de babear por mí.

Reacciono y digo guao, cada día tienes más grande el ego, debes tener muchas mujeres que te lo alimentan, lástima no entro en ese grupo, él se acerca demasiado y me dice—, tranquila que la única que lo va a disfrutar vas a hacer tú—, soñar no cuesta nada ahora puede respetar mi espacio personal él retrocede.

Me indica que me prepare para conocer un poco la ciudad, luego de conocer la casa se retira y al fin siento que respiro ese hombre es arrogante pero hermoso.

Voy al baño, hago mis cosas noto que todo mi equipaje ya está arreglado, me coloco ropa cómoda, unas converse y vestido blanco deportivo, me hago una coleta aplico, rímel, brillo en mis labios y bajo.

Lo encuentro hablando por teléfono parece estar medio enfadado, voltea, me observa y cuelga y dice —, sígueme a la cocina —, entramos y está una señora mayor de unos 60 años cocinando, él dice —,

Nana te presento a Tara, quiero que lo que ella desee lo tenga esta será su casa, a partir de ahora sus órdenes serán como si fueran las mías indícale a los demás empleados—,

La nana lo observa, dice así será mi niño, voltea a verme y dice —, es un gusto conocerte, espero nos llevemos muy bien, yo soy quien cuida de este grandullón desde que nació me sonríe —, yo le digo muchas gracias nana yo espero que seamos amigas por el tiempo que esté aquí ella dice—,

tomen asiento ya sirvo el desayuno, Alessandro la ayuda con los platos y nos sentamos a comer.

Le digo disculpé señor Alessandro, no creo que sea prudente que me dé tanta autoridad en su casa, después de todo pronto buscaré un lugar donde vivir, él me observa—,

Tara, te lo voy a aclarar de nuevo tú de esta casa, no te vas a ir y tus órdenes se cumplirán al pie de la letra, es mi última palabra, no repito mis órdenes—,

Yo lo miro asombrada y digo disculpé, señor, ¿pero que pensara su novia de que su empleada vivir con usted?—,

Eso déjamelo a mí no es un tema del cual tengas que preocuparte, ¿o es que su novio sí tendrá problemas con eso?—,

¡Yo no tengo novio, cuando tenga a alguien le tendré que explicar!—.

Alessandro dice un problema menos y aclaro no vas a tener ningún novio, no quiero a ningún hombre cerca de ti que te quede claro, ahora vamos a conocer el edificio donde trabajaremos—,

No le discuto por el momento, ¡pero a mí nadie me ordena que hacer con mi vida!

Pienso si él cree que va a poder conmigo, está muy equivocado, no soy una muñeca de porcelana la cual mueven de lugar y no opina nada conmigo, está bien equivocado, más adelante le diré sus 4 cosas, nos subimos al auto y fuimos en silencio todo el camino.



Dejen sus votos y comentarios😘


EL SEÑOR EGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora