[K Project] Con Espada en Mano [SaruMi]

Capítulo 15: Algo más.

¡Hallo!, Muy tarde el capítulo... Lo sé... ¡Perdón! :'( Eso sí... creo que hay algo bueno, para los que le gusta supongo. ADVIERTO que hay lemon :B En fin, al final del capítulo explico muuuuchas cositas así que presten atención. ¡Disfruten!

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Fushimi simplemente se había quedado sin palabras. Quitó la vista del PDA, para mirar a su amigo totalmente preocupado. No pensó que lo iba a descubrir tan fácilmente. No podía decir nada, quiso volver la vista al aparato pero sólo lo apartó.

-¿No vas a decir nada?, ¿En serio?

-... -Dejó de mirar al pelinaranja, se concentró en un punto fijo de la pared.

-Saruhiko... ¡Dame una maldita explicación!- Sus gritos parecían retumbar en toda la habitación, de seguro alguien afuera había llegado a escuchar.

El pelioscuro echó un suspiro, luego sin dejar de estar en silencio bajó de su cama y se paró justo al frente de Yata. Tenía una mirada fría pero muy dentro de él estaba asustado y a la vez nervioso, también avergonzado. Pero no iba a dejar mostrarse de esa manera.

En cambio, el mayor estaba todavía furioso. Cerró el puño casi pretendiendo golpear a Fushimi. Su brazo temblaba, intentaba controlarse.

-Agh, ¡Di algo!- Ya si no contestaba, iba a estamparle el puño en toda la cara. No podría controlarse mucho más.

Fushimi sólo rodó los ojos y volvió la vista al pelinaranja. Unos segundos se mantuvieron en silencio. Notó cómo el puño del mayor estaba cargado de ira, así que no tenía opción. Pero obviamente aquella opción no iba a ser responder con palabras.

Tomó el rostro de Yata y lo acercó al suyo para besarlo. No lo iba a soltar, ni aunque el mayor quisiera zafarse. Acarició su rostro, intentaba ignorar lo que el otro pensara sobre lo que hacía.

Yata simplemente había quedado de piedra, y su corazón latía a mil. No se lo esperaba, apenas reaccionó ni intentó separarlo, relajó aquel puño cargado de ira y abrió un poco la boca, dejando así espacio suficiente para poder entrelazar lenguas con el otro. Luego abrazó al pelioscuro, estando realmente cerca de él. No tenían ni idea del tiempo que habían estado así, pero el pelinaranja se quedaba sin aire así que se separó un poco del menor, apartándolo.

-¿Qué fue eso? - Una obvia pregunta, que la respuesta había sido dada sin palabras.

-Misaki...- Sólo dijo eso, y empujó al mayor para que cayera sobre la cama.

-¡Sa-Saru!- Intentó levantarse pero antes de que se diera cuenta ya estaba Fushimi sobre él. -Saru...

-Tsk, ¿Sólo sabes decir eso Misaki?- Acarició una de sus mejillas y volvió a besarlo. El mayor no se negó en lo absoluto, abrazó a Fushimi mientras acariciaba su espalda por sobre la ropa.

El pelioscuro llevó su mano bajo la camiseta del mayor y comenzó a acariciar suavemente su cintura, sin dejar de besarlo.

-¡E-Espera!, ¿No sabes hablar o qué?- Yata se salió del beso. Se retorcía con las caricias del menor. Poco a poco, las manos de este último fueron subiendo hacia los pezones del pelinaranja.