[Parte 2] Capítulo 20: Palabras Hirientes.

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¡Hallo! ¡Actualicé bien rápido! Pidan un deseo, esto sólo sucede unas pocas veces en la vida (? Aún recuerdo que los primeros capítulos los actualizaba todos los días, al parecer ha vuelto mi entusiasmo. Y ahora con los lentes veo mejor y puedo escribir tranquilamente... Me falta un Misaki y completo mi transformación en Saru... ok no.

Bien, sin más que decir... ¡Disfruten! ♥

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Yata despertó antes que Saruhiko de la larga siesta. Su dolor disminuyó muchísimo, descansar realmente le había hecho bien. No podía creer como él había despertado antes que el pelioscuro, ¡Siempre era al revés! Pero no podía volver a dormir, así que se levantó decidido a tomar un baño.

Tomó un atuendo casual y se dirigió hacia las duchas del establecimiento, completamente públicas. Aunque ya siendo de noche lo más probable es que no hubiese nadie allí. Se tomó su tiempo quitando las vendas, tenía miedo de que le doliese o de poder lastimarse más de lo que ya estaba. Al mirarse a uno de los espejos que habían por ahí pudo ver mucho mejor todas aquellas marcas.

Se sintió mal. Quería acción y cuando la tuvo fue el que peor salió lastimado. Había fracasado... Por lo menos así lo sentía él. Luego de reflexionar frente a su reflejo, entró a la ducha y por fin pudo relajarse por completo. Iba a olvidar ese ataque, se prometió a sí mismo no salir a pelear solo, nunca más. Y si podía ir con Saruhiko, mejor.

Tomó una rápida ducha, luego salió y comenzó a vestirse con la ropa súper casual, para ya quedarse en su cuarto toda la noche sin salir de allí. Lucía bastante animado. Ya no sentía dolor, quizás el agua caliente le había calmado por un rato las heridas.

De repente, escuchó sonar su reloj -PDA-, era un mensaje. El pequeño aparato se encontraba tirado entre la ropa sucia, pues no podía entrar a ducharse con él. Cuando lo encontró, pudo leer aquel mensaje. Era de Kusanagi.

"Yata-chan, espero que te encuentres mucho mejor, ¡Nos has preocupado a todos! Si necesitas algo, házmelo saber"

El pelinaranja no lograba comprender del todo el texto. "¿Acaso Saruhiko les contó sobre el ataque?" Primero pensó eso, pero con la gran distancia que el pelioscuro quiere tener con HOMRA razonó que habría sido imposible que les haya dicho.

Pensó que quizás Munakata le había contado a Mikoto. Pues entre HOMRA y Scepter 4 no había una mala relación, por lo menos los reyes se llevaba bastante bien entre ellos. Quedó con esa conclusión, era la más realista.

Cuando estaba a punto de dejar de prestarle atención a su PDA, comenzó a recibir una llamada. Era Kusanagi de nuevo

—¿Kusanagi-san? —Respondió Yata algo desconcertado por el mensaje anterior.

[—Oh, Yata -chan. Quería saber si te encontrabas bien, digo... Realmente escribirlo en un mensaje no es lo mismo que hablar por teléfono.]

—Ah... Sí.. Jaja, ¡Me siento mucho mejor!— Su rostro se iluminó con una gran sonrisa.

[—Bueno, me alegro, ¡Ah! Y me preguntaba si esta noche... Ya es de noche, bueno... Si en un rato querrías pasar por el bar. Si no te es molestia, claro, es sólo para pasar el rato después de lo que te ha pasado. Puedes traer a Fushimi si quieres y...— Se escucharon murmullos en el auricular.— Oh, y a Neko pregúntale si quiere venir también... Sí, al parecer ella se lleva bien con alguien de aquí, así que no es problema. Y Seri-chan sabe sobre esto, así que ella vendrá también, ¿Qué dices?—]

Ni lo dudó, y aceptó lo que el rubio le propuso. Cruzaba los dedos porque Saruhiko aceptase la propuesta también. Secó su cabello con una toalla, tomó sus cosas y fue a paso rápido -casi a trote- hacia su habitación para hacerle saber a su chico sobre la reunión con los rojos.

[K Project] Con Espada en Mano [SaruMi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora