La protectora

Capítulo 13

No supo cómo, pero termino encerrado en una especie de prisión, estaba confundido y preocupado, no sabía dónde estaba ni por que despertó sin un solo recuerdo más que su hermana, ese era otro motivo de su inquietud, desde que despertó no sabía dónde estaba, esperaba que estuviera bien y poder encontrarla para protegerla.

Escucho rudos afuera, así que trato de ver entre los barrotes, pero retrocedió asustado cuando la imponente figura de un joven moreno se presentó ante él.

- Hola novato, soy Alby – se presentó mirando detalladamente al joven.

- ¿Dónde estoy, donde está mi hermana? – pregunto mirando al joven frente a él que lo miraba con sospecha y su última pregunta solo logro que las alertas del joven moreno se encendieran.

- Tranquilo, todos pasamos por lo mismo – dijo abriendo la celda mirando las puertas esperando que los corredores aun no aparecieran, - ¿Recuerdas algo, ¿cómo te llamas?  – pregunto una vez la celda estuvo abierta.

- No…no recuerdo nada…solo… solo sé que tengo una melliza – dijo con nervios mientras jugaba con sus manos, - ¿Por qué no recuerdo nada? – pregunto mirando al joven que lo miraba.

- Nos pasa a todos, lo recordaras en unos días – dijo tratando de no volverse paranoico con el asunto, - Mira si prometes no correr te dejare salir y te mostrare el lugar – dijo ayudando al joven a salir del agujero como ellos lo llamaban.

Una vez que volvió a salir, caminaron por el área con el mayor indicándole como se llevaban las cosas en ese lugar.

- La cocina donde comemos, los corrales donde se crían los animales, los constructores, los huertos donde plantamos lo necesario, la choza donde dormimos, - dijo el mayor mientras miraba al joven que parecía atento a todo a su alrededor.

Cuando el joven estaba por preguntar por esas extrañas puertas, un joven rubio llego con una gran sonrisa saludo a su amigo y al nuevo novato.

- Hey Alby, novato – saludo mirando al joven, junto a su amigo

- Hola Newt – saludo con una sonrisa el moreno y después miro al pelinegro, - Este chico es Newt, el segundo al mando, cuando yo no estoy – dijo cuando ambos se saludaron

- Que bueno que nunca te ausentas, - sonrió con burla mirando al novato, -  Oye fue increíble tu entrada, creí que tendríamos un corredor…hasta que te caíste me encanto – dijo sonriendo.

- ¿Corredor? – pregunto con confusión mirando al rubio esperando su respuesta.

- Newt, hazme un favor, busca a Chuck – indico mientras miraba al rubio quien sonrió y fue por el joven.

El moreno y el pelinegro se encontraban en un mirador de donde se podía ver toda el área y que el joven moreno usaba cuando cierta joven se escondía para no ser regañada.

- Todos hacemos nuestra parte para que este lugar funcione, y eso es porque hay confianza entre nosotros, - dijo mirando al joven con recelo al ver su mirada en las puertas, - Escucha aquí tenemos solo tres reglas… Numero uno: Nunca atacar a ningún habitante esto funciona porque hay confianza te lo dije, Numero 2: Has tu parte no queremos holgazanes y Numero Tres: jamás salgas de estos muros… - dijo con seriedad mirando al joven y cuando el pequeño Chuck se presento supo que tenía que hablar con el sobre su hija, - Escucha, hay una chica con nosotros… - para al ver la mirada sorprendida del joven y pude ver cierta esperanza.

- ¿Una chica? – pregunto esperando que el moreno continuara.

- Si, ella es… especial, el Área entera la adora así que espero la trates con respeto y no la molestes – dijo con seriedad siempre que hablaba con un novato se aseguraba de aclarar su punto.

- ¿Por qué lo dices? – el joven estaba confundido.

- Ella es diferente a nosotros… los que nos pusieron aquí lo lastimaron y ella tiene orejas y una cola de lobo, pero todos aquí la quieren mucho y si ven alguna agresión de tu parte ninguno dudara en exiliarte de aquí… incluido yo… ¿entendido? – el joven no sabía que decir, así que simplemente asintió con la cabeza.

Con eso el moreno lo dejo con el niño y continua con sus actividades tenía que asegurarse de que ese joven no era quien el creía si no todo sería un completo caos.

El día paso tranquilo, Chuck acomodo las cosas del nuevo novato y su hamaca donde dormiría junto a la suya, el hablaba sobre como él era el novato anterior pero el más alto no estaba prestándole atención, su vista estaba fija en las puertas, era la única salida que había visto y no entendía por qué nadie podía cruzarlas.

Así que camino en dirección a las puertas dispuesto a saber el motivo del por qué no podía salir, pero fue detenido por el niño que debía de vigilarlo por lo menos hasta que se acoplara al lugar.

- Oye, ¿Qué haces? No puedes salir – dijo mirando al redor esperando que nadie los viera.

- No lo hare solo quiero ver – respondió caminado nuevamente, pero siendo detenidos iguales.