CAPITULO XXXXIV: KING'S LANDING

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En King's Landing, no mucho después de la última tragedia, se encontraba Lord Corlys Velaryon que había partido al lugar apenas se había enterado del deceso de su esposa y nieta, fue al salón del Trono de Hierro donde ya se encontraba, ocupando dicho sitio, Otto Hightower, la reina Alicent, el príncipe Aemond y tres guardias reales, entre ellos estaba sir Criston Cole.

—No está en condiciones de exigir nada, lord Velaryon, tanto su nieta, lady Baela, como su esposa, la princesa Rhaenys, fueron encontradas culpables de alta traición al intentar asesinar a la princesa Alaerys y a los hijos del heredero al Trono, sin contar que en el proceso hirieron gravemente al príncipe Aegon. —La mano de rey dejó las cosas claras desde el principio cuando vio una posible hostilidad del lord.

—Mi esposa no pretendía hacer nada de eso, ella solo intentaba detener a mi nieta. —intentó excusar aquel atroz hecho.

—Haya sido su intención o no, la princesa atacó al príncipe Aegon y se unió al ataque en Dragonstone. Sin embargo, debido a que su intención inicial no parece haber sido con malicia se la dara una indulgencia en la que no será tratada como una traidora. —

—¿¡Ni siquiera me permitieron tener su cuerpo para un funeral y eso es lo mejor que me ofrecerán!? ¡Mi esposa y mi nieta fallecieron y no fueron más que alimento para sus dragones! —

—¿Esperaba algo diferente lord Velaryon? Atacaron a la familia real, hay cientos de testigos del hecho, agradezca que el nombre de su esposa no será tratado como el de una traidora, que lo fue, y qué no se está castigando a toda su casa. —

—Le recuerdo que, la princesa Alaerys, es también su nieta, aún cuándo se apellide ahora Targaryen es una Velaryon ¿No proclamó siempre sobre la sangre Velaryon de los hijos de su primogénito Laenor? Su nieta y sus hijos fueron atacados, parece ser que solo le interesa alguno de sus familiares, lord. —Alicent atacó.

—Esto es parte de su culpa y usted lo sabe. —Aemond habló por primera vez.— Todos ustedes, los Velaryon, públicamente mostraron rechazo y odio infundado contra mi esposa, alimentaron un odio que hizo que lady Baela siguiera a la princesa Rhaenyra en esta locura, impulsaron este altercado, aún así no olvidaré que la princesa Rhaenys era un ser querido para mi padre y, en un acto de buena voluntad, mi esposa y yo estamos dispuestos a ofrecerle un compromiso, sé que no le basta la sangre de su nieta en los herederos al trono, por lo cuál consideramos que alguna de las hijas que podría tener el príncipe Lucerys y lady Rhaena, —hizo mayor hincapié en el nombre de ella, la única Velaryon real.— se casara con nuestro primogénito y futuro heredero al Trono de Hierro. —

—Es una oferta más que generosa teniendo en cuenta lo sucedido. —Alicent acotó.

—Lo acepto. —estaba resignado, el dolor de su pérdida era grande pero sabía que el príncipe Aemond hablaba con la razón, odiar más a la princesa no haría que las cosas cambien, su nieta busco venganza por su prometido y no obtuvo más que su propia sangre, buscar más odio solo traería más desdicha a la poca familia que le quedaba.— Deseo que el príncipe Lucerys y lady Rhaena se asienten en Driftmark. —

—Eso es una desición del príncipe Lucerys y su prometida, si ellos así lo desean así sera. —Otto había querido decir algo pero su nieto lo había interrumpido con el fin de que no echara a ciegas a su sobrino al cuál le había agarrado cariño.

 —Otto había querido decir algo pero su nieto lo había interrumpido con el fin de que no echara a ciegas a su sobrino al cuál le había agarrado cariño

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Secretos & Deseos {Aemond/Aegon}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora