Año 146 d.c.
—¡¿Cómo pudiste hacerlo?! —
—¡Corwyn, para! —Daemony tiraba de su brazo.
—Hijo, déjame explicártelo...— sollozo Rhaena.
—¡No hay nada que explicar! —Laena se había metido en la discusión y eso que Cery intentaba detenerla pero no lo lograba.— ¡Tus estúpidas excusas no sirven! ¡con papá también sufrimos las pérdidas pero nunca nos desquitamos contigo ni con nadie! ¡nunca nos apartamos como lo hiciste! —
—Laena, es suficiente. —Daemon llegó y se pusó delante de su hija.
—¡No! ¡No es suficiente! —Laena bramó.
Daemony soltó a Corwyn para suplicarle a su prima que pare, pero no lo consiguió, si la princesa era prepotente y valiente, Laena lo era el doble.
—¡Estuve años teniendo que soportar su descaro! ¡Verla coquetear con ese infeliz por los pasillos! ¡Celebrando con alcohol cada vez que mi padre se iba! ¡¿Creés que las tormentas tapan los sonidos que hacían cuándo bebían de más y olvidaban que había más personas en el castillo?! ¡Mi padre no merecía nada de eso! ¡Yo no lo merecía! —
—Ya no tendrás que tolerarlo más. —Daemon mencionó con dolor.— Addam Velaryon fue ejecutado y Rhaena,—se giró a verla.— hija, has sido exiliada de Westeros hasta que des a luz, y luego podrás volver si lo haces sola. —pusó sus manos en sus hombros.
—¡Ojalá no vuelvas nunca! —bramó Laena mientras se la llevaban sus dos primas lejos de ahí.
Corwyn se quedó un momento ahí en silencio, luego se acercó a su madre.
—No nos abandones por un bastardo, vuelve con nosotros, intenta rearmar nuestra familia, sé que papá lo permitirá. —ella intentó abrazarlo pero él se negó.— Pero no vuelvas si pretendes seguir torturandolo. —comentó antes de irse también, seguía enojado, seguía dolido pero eso no lo cegaria a decir alguna estupidez como que quería que ella desapareciera de sus vidas.
—Hablaré con Aemond, sé que si le explico...—
—¿Qué le explicaras, hija? No habrán palabras que quiten lo obvio, tuviste un amante y estás esperando un hijo. —terminó por abrazarla.— Fui claro contigo, te dije que arreglaras las cosas con Luke o en su defecto que le pidieras a Alaerys que te ayude a anular su matrimonio, no hiciste ninguna de las dos cosas y te atreviste a tener un amante. —
—Tú también tuviste, ¿por qué conmigo es distinto? —
—Porque tu esposo es el sobrino y uno de los mejores amigos del rey, también es el hermano favorito de la reina, sabías que no podías competir contra él, te alejaste de Alaerys para no tener que hablar del tema, si hubieras mantenido estrecha esa relación quizá las cosas habrían salido al menos un poco mejor. —
—Habla con mi hermana, si tú la convences ella lo convencerá a Aemond. —
—No, no tendría sentido, Alaerys nunca te perdonará, estoy seguro de eso. —se separó del abrazo.— Y Rhaena, hija, tú misma te pusiste en ésta posición, no puedo hacer nada por ti. Te acompañaré a encontrar un buen lugar para que estés hasta que des a luz, le conseguirás una buena familia y... —
—¿Me estás pidiendo que abandoné a mi hijo? —
—No podrás volver con él. —
—No, no, no haré eso. —
—¿Abandonaras entonces a Corwyn y a Laena? —Daemon no esperaba esa respuesta.
—Ellos son grandes, tienen un padre y una familia aquí, no estarían solos, pero mi hijo cuándo nazca si lo estaría. —
ESTÁS LEYENDO
Secretos & Deseos {Aemond/Aegon}
FanfictionAlaerys nació como la primogénita de Rhaenyra Targaryen y aunque formalmente su padre es Laenor Velaryon todo el mundo nota su bastardia en sus mechones negros como la noche entre los platinados. Solo el círculo interno de la realeza intuye que Sir...