3 6 S E O K J I N

191 26 0
                                    

El maestro examino más detalladamente mis planas, parecía que buscaba el mínimo error, solo pude pedir al cielo que estuvieran bien hechas, suspiré un poco y entre en resignación cuando las arrojo al piso.

— inaceptable — contesto mirándome con molestia — pon las manos

Tomo su vara y sin miramiento alguno azoto dos veces mis manos fuertemente, solo pude cerrar los ojos y contener el aire.

— si un sirviente vuelve a hacer tu tarea te azotare en la cara — contesto molesto — vete

Camine a paso lento a mi habitación, no quería nada, no quería que nadie me viera, solo quería regresar a corea, no me importaba nada.

Suspire un poco y camine hasta uno de los muchos jardines que había en el palacio, me senté bajo uno de los árboles y mire mis rojas e hinchadas manos, justo cuando pensé estaba teniendo un poco de paz un guardia me hablo.

— el emperador desea verlo — hablo el chico en voz baja mirando mis manos levemente a lo cual las escondí avergonzado

Camine siguiendo al chico entre los muchos caminos del palacio, cuando llegamos al despacho del emperador solo pude respirar fuertemente para tratar de calmarme, mire mis manos avergonzado y trate de ocultarlas, el chico que me había acompañado me extendió un pequeño pedazo de tela que enrolle en mis manos y las aprete juntas.

— gracias — dije con la voz quebrada

Entre a la oficina me incline y baje los ojos rápidamente.

— majestad — dije suavemente

— he hablado con tu maestro Seokjin — dijo en voz fría, no pude contestar nada — en vista de que no dirás nada solo quiero que sepas que estoy muy decepcionado de ti — contesto sin mirarme

— lo lamento majestad — dije en voz baja

— espero mejores tu desempeño, tu actitud y tus modales — dijo suspirando

— majestad yo...— dije pero me interrumpió

— eso es todo, puedes irte — dijo mirando sus documentos

Me incline y salí del despacho cerrando la puerta, en ese momento lo escuche a Yun

— ¿quiere majestad que vea la posibilidad de regresarlo a corea? — pregunto

— tal vez sea lo mejor — contesto el emperador suspirando

Me aleje a pasos apresurados del palacio principal y cuando llegue a mi dormitorio me permití derrumbarme.

¿me aceptarían en corea de regreso? No sonaba tan mal esa idea, pero el solo hecho de ser regresado implicaba una deshonra para mi clan y mi hermano, debía esforzarme más.

Sería el doncel que el emperador deseara que fuera y si necesitaba perderme a mí mismo en el proceso entonces eso haría. 

El doncel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora