Estaba mirando su rostro, permitiéndome analizar sus pómulos marcados y sus facciones preocupadas, el doctor Shu decía que despertaría cuando estuviera más tranquilo, era como si su cuerpo no pudiera con la presión.
— aun cuando estas inconsciente pudo ver que estas preocupado por reaccionar, deberías descansar — dije besando delicadamente su mano.
— su majestad, el señor Wang Jiaer lo solicita en el salón del trono, dice que tiene todo listo — comento el guardia.
Bese la mano del doncel de nuevo y camine hasta la salida, quería respuestas y sabía que Jiaer me daría lo que necesitaba, a paso decidido entre al salón del trono y me senté en el mismo mirando a los presentes.
— Jiaer, habla — dije mirándolo a los ojos
— su majestad, todo este problema tiene varios meses, tal parece que la emperatriz ha sufrido acosos constantes por parte de Yun Wain — contesto a lo que mire a mi eunuco personal entre los presentes, este me miraba suplicante y guardaba silencio esperando su tiempo de defenderse
— explícate — dije molesto.
— todo comenzó cuando la emperatriz "arruino" aquella reunión con la corte, después de que se decidiera eran necesarias clases personales — lo recordaba, esa reunión fue un desastre — Yun Wain con ayuda de su padre el profesor Yun comenzaron a sofocar a su majestad con clases adicionales y tareas absurdas — mi hermano me extendió un conjunto de notas, le pedían hacer muchas planas, casi ridículas, memorizar libros y contestar preguntas complejas sobre lecturas de un día para otro.
— ¿Qué más? — pregunte arrojando los papeles a un lado
— si su majestad se equivocaba era fuertemente reprendido, sus manos sufrían el mayor de los castigos, sus sirvientas atestiguan su majestad era golpeado a diario y a veces eso le impedía escribir por lo cual sus sirvientas tuvieron que escribir por él en muchas ocasiones — mire al maestro molesto y hable
— ¿para eso me hablaste y dijiste que él era flojo y lento? — grite molesto, suspire y volví a preguntar — ¿Qué más?
— Yun al notar que usted lo seguía tomando en cuenta comenzó a sofocarlo con la comida, dejando su despensa casi vacía y limitando su sueño agregando clases adicionales, sus sirvientas atestiguan que su majestad podía pasar días sin comer o dormir para tratar de rendir el máximo — dijo mi hermano
— de pie Yun — dije a lo que el eunuco se puso de pie — ¿tienes algo que decir?
— majestad, todo esto solo demuestra que él no es el mejor compañero para usted mi señor, es torpe, lento, es un salvaje — mire a la sirvienta mayor del doncel y entonces hable.
— ¿quieres agregar algo? Puedes decir lo que piensas, sin repercusiones — dije y ella se puso de pie y hablo sin miedo alguno
— lo atormentaba, se reía de su majestad — la mujer comenzó a llorar — constantemente le decía que estaba gordo, que era un salvaje que no merecía la pena — la mujer ahora gritaba — él jamás volverá a ser el mismo, lo rompió, rompió algo dentro de él y jamás lo recuperaremos, lo volvió alguien inseguro y sumiso y lo hacía sentir pequeño
La mujer me miro y se derrumbó al piso llorando desconsolada.
— jamás podrá volver a ser el mismo, el solo quería ser suficiente, en corea nadie lo trataba como príncipe o como alguien digno y apenas estaba ganando esa confianza gracias a la emperatriz Min, pero ahora ya no queda nada de ese valiente doncel dispuesto a todo — la mujer me miro y guardo silencio
— no tengo duda de lo sucedido — dije conteniendo las lágrimas en un nudo en la garganta — decapita al profesor Yun ahora mismo — conteste mirando a mi hermano quien sin dudarlo tomo su espada y en rápido movimiento corto la cabeza del profesor a lo que el eunuco Yun grito desconsolado y los presentes se giraron un poco para evitar ver la cabeza aun con los ojos abiertos — en cuanto al eunuco será desterrado y azotado en sus manos lo equivalente a seis meses diarios en un mismo día, su familia pagara las consecuencias, no quiero volver a ver a su clan.
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El doncel.
FanfictionSer doncel jamás fue sencillo, mi familia dejo en claro que era algo que no deseaban y mucho menos algo que la sociedad aceptara tan fácilmente, pero jamás pensé mi vida cambiaria hasta este punto, por que el palacio real era no solo un laberinto po...