México-Jalisco.
04 de Agosto del 2021.Dudas era lo que invadía a la pelirroja, tirada en aquel frío suelo mientras, miraba como las llamas se extendían por todo el lugar frente a ella. Imaginando que sus compañeros, los que no lograrían escapar del horrible destinó, ahora eran consumidores por el fuego, si no habían muerto en la explosión, morirían por las llamas que ahora danzaban.
Recordando el rostro de esa mujer que le disparó, se comenzó a llenar de rencor, resentimiento y duda. Se trataba de Betza, la había conocido cuando llego al AISAN, una chica carismática, segura de sí, de aquellas que no temen decir las cosas en la cara, o como solía decir Blanca, no tenía pelos en la lengua.
Era una características que en más de una ocasión la llevo a recibir llamadas de atención, por parte de los lideres, aunque a Jace no parecía molestarle mucho ese hecho, y tal vez ahora entendía el motivo. Claro que lo entendía, como pudieron estar tan ciegos y no darse cuenta antes de lo que estaba ocurriendo, porque Jace era tan compareciente, siempre los apoyaba en lo que se les ocurriera.
Era claro que nada bueno podía salir de eso pero lamentablemente lo habían descubierto cuando ya era demasiado tarde. Dudaba que Robert haya logrado escapar, esa mirada de pesar y pena, claramente no iba a regresar estaban solos a partir de ahora.
Pero no podía creer que los tres líderes hayan dado sus vidas para que unos pocos pudieran escapar, no tenía sentidos y al menos para ella no lo entendía. Tal vez porque estaba acostumbrado a que las personas sacrificarán a otros para salvarse a sí mismo.
Entonces siento unos pasos acercarse, intento levantarse, pero el dolor intenso en su pierna, la hizo caer nuevamente de rodillas, jadeando por el penetrante dolor que la bala le estaba ocasionado, el sangrado no se había detenido.
Vector no tenía intenciones de despertar, aquello volvía más complicada la situación, más por el hecho de que la sangre y la explosión atraería a los infectados, eso no era bueno, realmente era todo lo contrario a bueno, tenían que moverse rápido, antes de terminar siendo la cena de esas alimañas.
Cuando se giró apuntando con su arma, divisó de quien se trataba. No sabía si sentirse aliviada o ser desconfiada. Ese cabello oscuro, tanto como el abano, su mirada penetrante y agotada, su rostro manchado por sangre seca, mientras que la falta de un ojo y el parche en su lugar estaban presentes.
Vicent, el tercer líder de lo que alguna vez fue el AISAN y ahora no era más que un montón de cuerpos. Aunque... ¿Alguien más habla escapado a parte de ellos? Y si ese era el caso ¿Cómo confiar?
No bajo el arma ante el militar, quien la apreciaba con cierto pesar. No sabía exactamente lo que pensaba Blanca en esos momentos, pero la relacionaba cómo una bestia salvaje que se encontraba herida e intentaban mantenerse a salvó, sabía que tenía que actuar con cautela, porque ella no bajaría la guardia rápido, no después de lo que acaba de pasar.
Menos sin que aún conocieran la verdad que estaba detrás de todo.
—Al menos ustedes lograron sobrevivir—confeso por fin con voz tranquila y de cierto modo apático— lamento la perdida de todos.
—No de ni un paso más —advirtió ella decidida— y estoy hablando muy en serio.
—Tranquila aquí me quedo.
Levantó las manos a modo de rendición y dejo de avanzar cuando la chica se lo ordeno. Miro la herida que tenía en la pierna, tenía que inspección si la bala había salido o permanecía en el interior de la pierna, podía ser peligroso para Blanca que la bala permaneciera mucho tiempo ahí, además estaba perdiendo mucha sangre mientras hablaban.
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【✜ Escapando De La Muerte ✜】
Science FictionHan trascurrido dos años desde la aparición de aquella infección, que llevo a la destrucción aquel país, que alguna vez fue conocido como Venezuela, un palacio tropical, rico en cultura, paisajes y lugares turísticos, pero uno de los atributos más r...