Bleach: Time is always against us

Capítulo 20: Toki no Hi

Varias horas antes, Mirai sigue a Yuto, quién la lleva, por la parte del bosque de uno de los templos que hay en la ciudad.

–Por aquí se llega a mi base secreta. A partir de ahora, será nuestra–responde Yuto con una sonrisa.

–¡Es genial!–grita Mirai muy emocionada.

–Sí y ahí, vamos a conseguir liberar tu shikai–sonríe Yuto.

–¡Quiero ser fuerte para poder ayudar! Debo hacerme más fuerte, ya que los malos vienen a por mí–Mirai responde y Yuto sonríe.

–Lo vamos a conseguir. Sé como papá, hace el entrenamiento de shikai–sonríe.

Los dos se giran y miran a Hisagi Shuhei que los sigue de cerca.

–Hisagi-san, ya no puedes pasar de aquí. Debes vigilarnos desde fuera–señala Yuto–Es nuestra base secreta y como es secreta no puedes venir–.

–Shuhei-nii ¿Puedes esperar fuera?–pide Mirai.

–Lo comprendo, estaré fuera. Pasarlo bien jugando–Hisagi responde y salta a una rama, desde donde observa un enorme arbusto que encima tiene un enorme manto que se encuentra anclado al suelo. Se nota, que alguien ayudó a montarlo.

Adentro, los dos observan cartones y encima una enorme manta que usan como suelo, además de haber muchas revistas de manga, patatas y golosinas.

–Es genial–responde Mirai con ojos brillantes.

–Lo sé–sonríe con orgullo y ambos se sientan en la manta.

–¿Cómo puedo despertar mi shikai?–pregunta Mirai con curiosidad.

–Muy fácil, tenemos que estar en forma shinigami. Luego hay que concentrarse y entrar en el mundo de tu zanpakuto y después intentar ganar su favor, para que te diga su nombre–explica Yuto.

–De acuerdo, vamos hacerlo–sonríe la pequeña Aizen muy emocionada.

Ambos se convierten en shinigami y Shuhei, quién se encontraba en el árbol, se altera al sentirlo. Baja de un salto, entra a la base secreta y observa que solo están en modo shinigami.

–No me deis esos sustos. Además, ¿Por qué estáis en modo shinigami?–Shuhei indica.

–¡Es un secreto! Fuera, fuera. No has sido invitado a nuestra base secreta –dicen ambos niños a la vez y empiezan a empujarlo afuera. Este se da la vuelta cuando está fuera de la base.

–Estos niños...–suspira y sigue mirando alrededor–Están bastante lejos de algún centro urbano. Es bueno y malo a la vez–.

Mientras los dos, en la base secreta, se sientan en el suelo y se ponen a meditar. Se escucha el ruido de la naturaleza, de fondo, hasta que Mirai deja de escucharla y abre los ojos. Observa el salón de su casa, en el sofá, hay una persona idéntica a ella con forma de hollow. En la mesa del salón donde comen, ve a otra idéntica a ella de pelo negro y ropa blanca, jugando con sr. Kuma.

En el centro del salón, se ve una jaula donde dentro hay un hermoso fénix con un reloj de arena pintado en su pecho.

–Oh, apareció –dice la que se parece a un hollow

–Has venido, Mirai del mundo real–sonríe la Mirai de pelo negro, quién deja de jugar con sus muñecos.

–¿Quiénes sois?–pregunta la pequeña.

–Somos partes de ti–responde la Mirai Hollow.

–¿Partes de mí?–pregunta.

–Sí, por ejemplo, yo soy aquella parte de ti que te permite absorber el reiatsu, es decir, tu parte quincy por tu abuelo materno –responde la de pelo negro.