Bleach: Time is always against us

Capítulo 14: Un ataque a la Sociedad de Almas

En la Sociedad de Almas, Hisagi lleva de la mano a Mirai mientras se dirigen al cuartel de la 13 división, donde espera Rukia, para el entrenamiento de la pequeña.

Shuhei se detiene cuando nota como Mirai aprieta con fuerza su pierna mientras se queda mirando a los shinigamis que pasean por la zona.

–Mirai, tenemos que movernos–Hisagi indica y nota a Mirai apretar más fuerte a su pierna, quieta y sin moverse. Al final, la tiene que cargar en sus brazos y camina hacia donde está la capitana Rukia–Ha cambiado su comportamiento...lo mismo pasó con los dos ataques anteriores...puede...puede ¿Qué haya un ataque en la Sociedad de Almas? Pero no se ha quedado mirando a ningún punto...Este tiempo, he conseguido sabermás sobre el comportamiento de Mirai...Por si acaso, cuando la deje con Rukia-san, iré a ver a Kyoraku-san–.

–Rukia-san, te dejo a Mirai–Shuhei indica mientras deja a Mirai en el suelo.

–Estaba esperando el momento que me tocara, ¡Mirai-chan!–Rukia grita emocionada y la abraza–Eres tan mona–.

–Entonces, si me permite me iré–Shuhei se gira y nota a Mirai sujetarle.

–No te vayas–pide con su voz infantil.

–Rukia-san es muy fuerte, estarás segura–Hisagi indica mientras se pone a su altura.

–Pero...pero...–Mirai pone un puchero.

–Además, tengo que hablar con Kyoraku-san–Shuhei indica y Mirai lo mira.

–Cuando termines, ven–pide y Hisagi sonríe.

–Claro–.

Tras decir eso, se marcha y Rukia mira como Mirai se está comportando de una forma diferente a lo usual.

–Ya sé ¿Por qué no entrenamos hoy con mi hermano mayor?–Rukia sonríe–Es muy poderoso–.

–¿Tu hermano mayor?–pregunta con duda.

–Claro, vamos–sonríe y la toma de la mano, saliendo ambas hacia el cuartel de la sexta división.

Al llegar, Mirai mira a Byakuya Kuchiki, que la observa de arriba a abajo y cambia la mirada hacia Rukia.

–¿Por qué habéis venido?–pregunta.

–Bueno, Mirai-chan está algo asustada y si está en un lugar donde haya personas fuertes, se sentirá más segura–sonríe su hermana.

Byakuya vuelve su mirada a la niña, que lo observa mientras está sujeta a la pierna de Rukia.

–Parece que está asustada–indica Byakuya.

–Es bastante tímida con los extraños–sigue contando y este suspira.

–Haced lo que queráis–.

Rukia empieza a entrenar a Mirai para prepararla en el proceso de despertar su Shikai. Byakuya, por su parte, observa el entrenamiento y se sorprende que la niña sepa controlar bastante bien su zanpakuto.

–Vamos a tomar un descanso ¿Damos un paseo?–pregunta Rukia a la pequeña quién está mirando a Byakuya, camina hacia él.

–Ven tú también–pide.

Se miran ambos y Rukia se pone algo nerviosa–nii-san, ven–.

–Está bien–responde y se levanta.

Los tres caminan fuera y Byakuya sigue observando el comportamiento de la hija de Aizen, quién, cuando aparece un shinigami a saludarlos, la pequeña se sujeta un poco en su pierna.

Hasta que la pequeña ve a un grupo de shinigamis. Mirai se detiene de forma abrupta y los mira mientras  se sujeta con fuerza la pierna de Byakuya.

–Rukia, llévate a Mirai–indica con seriedad.