Signos vitales de viejas memorias (en edición)

Capitulo 6

- Alba, me llamo alba- Dijé de golpe después del silencio incomodo entre los tres. Aquella conexión de mentes me sorprendió bastante.

-Mia sal por favor- Dijó él, al parecer esa chica se llamaba Mia-.

Vi como mostraba un puchero de frustración y seguidamente se iba. Agache la barbilla avergonzada pero vi de reojo como él se acercaba y y agarraba mi barbilla con delicadeza y volvia a levantarla, obligándome a miralo a los ojos.

- Cual es tu historia?- preguntó de repente-.

Mi historia? Y a este que le importa?

-Si quieres quedarte tendrás que contármela- dijó de manera cansada.

Mi historia? Mi madre murió una semana después de haber nacido, nunca la conocí. La arrolló un camión.

Durante los seis años de mi vida viví con mi padre hasta que el se volvió a casar con Judith, mi madrastra. Mi padre siempre estaba viajando así que no lo veía nunca y prácticamente, como mi madrastra odiaba a los niños me maltrataba y era su criada. Siempre que llegaba mi padre le decía que me había caído. Hasta llegó a pensar que podía tener un problema para andar.

Hace 4 años murió en aquel tiroteo de la joyería que habían construido el y mi madre un año antes de nacer yo.

Fue el infierno más largo de mi vida. Hay niños que dirían que estar en casa es mejor que el instituto. Pues ese no era mi caso.

-Odio mi vida, así de simple, no iba a permitir que escribieran mi historia como si fuera un personaje inventado de un libro-. Le dije-.

-Bien- me contestó de mala manera y no muy convencido- Cambiate y sal-.

Salió del cuarto ignorando mi rostro sorprendido como si nada. Miré la esquina de la cama y pudé ver la ropa que me había prestado Alicia. Estaba doblada. Agarré la sudadera y la acerqué a mi rostro y una agradable olor de suavizante. Habian lavado mi ropa. Terminé de vestirme y salí por la puerta.

Esperaba encontarme con el pasillo de una casa, sin embargo, una brisa rozo mi rostro y un destello de Sol dificultó mi vista, Avanzé y cuando abrí mis ojos me quedé paralizada como si una capa de hielo hubiera cubierto mi cuerpo.

Temblaba. Donde rayos estábamos?!

Continuará....