Despues de la tormenta-Lucerys Velaryon

capitulo 5

Alysa

Empece a tenerle mucha confianza a Tadeo y después de nuestra última visita al mercado decidí enseñarle a pelear y defenderse. O al menos quería enseñarle.

La primera vez que lo lleve afuera a practicar intente primero enseñarle a esquivar golpes o pararlos, pero el ya era bastante diestro. Sabia manejar muy bien su cuerpo y sus manos. Sin embargo yo llegue a ganarle todos los combates. Estaba todavía un poco herido en las piernas, le daré ese punto a favor.

-Sabes Alysa yo siempre te vi como una chica fuerte y muy adiestrada en la defensa personal. Y espero no te incomode la pregunta pero como aprendiste y que paso con tus papás?-

-jaja no sé que tenía que ver mis papás con mi forma de pelear pero...-.

- no quise incomodarte y hace mucho me preguntaba eso, como una joven como tu puede vivir sola y mantenerse sola?-

-esta bien, mi madre murió dándome a luz. Mi papá siempre me culpo por eso y me llamaba demonio divino por haber matado a mi madre, a veces decía que yo naci para ser sicaria, porque ni bien llegué al mundo ya mate a alguien. Pero me crio como pudo.

Me trataba como un niño sin ningún cuidado, a veces ni me daba de comer. Hasta mis 8 años yo no tenía nombre y entonces un día el conoció a una mujer muy hermosa de vestido rojo que le devolvió la sonrisa. Ella fue la que me enseño todo lo que se, y fue mi figura materna. Me enseño a cocinar, a bailar y a cantar, mientras mi padre me enseñaba a pelear a defenderme e insultar. fueron los mejores 5 años de mi vida hasta que un día la mujer desapareció. Hasta el dia de hoy no se sabe porque y eso destrozó a mi papa, entonces el empezo a ser más descuidado y suicida, se enlistaba para ir a misiones de navegación o de guerra y un mes antes de que llegarás el salió a pelear una batalla al lado de la serpiente marina y nunca volvió. Sinceramente no sé si no quiere volver o ya no está vivo. Pero esa es mi historia, el me solía recordar que yo era de mala suerte porque incluso al haber Sido un ser tan inocente como lo es un bebé, mate al primer amor que tuvo. Y así es la miserable vida del demonio divino, bonita no?...-.

-Alysa, yo...

-No te disculpes ni sientas pena estoy bien de verdad. estoy bien pero seguiremos entrenando.

Tengo que admitir que el era un chico impresionante, entrenábamos todos las tardes en la playa, el decía que sentía que eso ya lo había vivido pero se sentía como un extraño. Luego de que yo considere que el estuvo preparado, pasamos a las espadas. Fabrique dos espadas de madera, y empezamos a practicar. Nunca tuve un rival más fuerte que mi papa, el me contó que el solía ser parte de un ejército grande y poderoso cuando era más joven pero lo abandonó cuando conoció a mi madre. Cuando empece a entrenar con Tadeo fue mucho más divertido, el era un rival que jamás había tenido. Yo siempre le terminaba ganando, aunque siempre terminaba sudando, algo que casi nadie lograba. Claro no había mucha gente con quién practicar pero ya había encontrado a mi pareja de duelo.