capitulo 15

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Lucerys

Empece a correr lo más rápido que pude. Veía a otros pueblerinos ir, para ver la pelea.

Lo único que podía pensar, era que nos tendríamos que ir. No importa que haya pasado o quien tuvo la culpa. No nos podríamos quedar ya que todos culparían a Alys.

Paso por mi cabeza todas las horas de trabajo y sacrificio que había hecho, y ahora... todo estaba arruinado.

Me sentí frustrado hacia Calira, sabía que ella inicio todo. Alysa era de defenderse no de atacar.

Cuando llegue a la escena, ví a Alys encima de Calira, mientras le daba de puñetes .

Los labios de Calira estaban sangrando y su cara estaba hinchada, pero aún se notaban las lágrimas.

No me importo lo único en lo que me fijé, era en el vestido de Alysa. La parte de abajo estaba llena de tierra, las mangas estaban rotas.

Apenas llegué al lugar, cuando analice todo esto y en ese milisegundo que me paralicé, recordé esas mañanas en las que no comí nada solo para poder ahorrar para comprar ese tonto vestido.

Inmediatamente agarre a Alysa de la cintura y la jale hasta que se soltó de Calira.

Estaba frustrado con Calira, con la situacion, y con la gente chismosa que se había reunido, solo para criticar más a Alysa.

Estaba tan enojado en el camino a casa, que me desahogue con mi Alys. Le empecé a gritar usando la excusa del vestido. Solo me sentía frustrado, pero cuando Alysa me grito que ella era mi perra a la que debía vestir, de verdad me preocupe.

No me había fijado que ella estaba llorando hasta que levante su mirada.

Hasta ese punto no me di cuenta que nunca le pregunté porque inicio la pelea, o que le dijo Calira para que reaccionara así.

Ella solo lloraba, sin parar y luego me empezó a gritar.

-Tu prefieres a la maldita Calira, la cuidas de que la bestia de tu perra no le haga nada-

Yo no entendía nada, a qué se refería con eso.
Le iba a pedir explicaciones cuando comenzó a correr, intente perseguirla pero Alysa siempre fue mas rápida que yo. Y se adentro en un espeso bosque

Mucho tenían miedo a ese bosque ya que era muy oscuro. Alysa y yo habíamos entrado un par de veces pero no más de unos cuantos metros ya que si entrabas más de lo debido ya no veías nada.

En el día ese lugar es iluminado y un poco bonito, pero apenas se puede caminar ya que los árboles estaban muy juntos.
Pero cuando anochecía ese lugar era un infierno.

Me preocupe inmediatamente por Alysa. No sabia si correr detrás de ella o buscar ayuda.

Si entraba con ella corría el riesgo de no poder alcanzarla y yo perderme, y capaz ni si quiera juntos sino separados.

Decidí que la esperaría, mi Alysa no era tonta, si ella entró, sabía cómo sali, pero no me quedaría sentado esperando.

Yo había cometido un error y tenía que remediarlo.

Despues de la tormenta-Lucerys VelaryonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora