capitulo 13

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Alysa

Pasamos por un restaurante en el cual vendían algo llamada pasta. Tadeo y yo nunca lo habíamos probado así que decidimos entrar.

Tadeo pidió algo llamado lasagna, que tenía queso de cabra por dentro, y yo pedí algo llamado al pesto, nada más porque tenía verde y todo lo que me enseñaron es que lo verde era sano.

La velada fue bonita. Mientras comimos, nos pusimos a charlar sobre nuestro siguiente plan.

Tadeo se comportaba muy extraño, desde el momento en que salimos de la cabaña estaba raro, sudoroso y distante.

Durante la comida hablo muy poco y lo único que quería era que nos separemos, según el para conocer a más gente.

-Entonces cuando empiece la fiesta tu te vas a bailar, y yo a presentarme a los jóvenes del pueblo verdad?- dijo Tadeo impaciente.

-Si supongo, si eso quieres Teo, estás en tu derecho de elegir que hacer no te puedo obligar a estar conmigo todo el tiempo.

Al salir del restaurante, que por cierto estuvo delicioso, Tadeo me dejó en una mesa de varias que estaban al centro de la plaza del pueblo.

Había gente tocando música, otros bailando y otros charlando.

No podía quejarme, algunos muchachos vinieron a hablarme lo cual me sorprendió, me invitaron a bailar y a charlar pero a pesar que nunca me quedé sola, me sentía así sin Teo

Ya estaba por ponerse el sol cuando decidí alejarme un poco de la fiesta general. E irme a respirar.

Me sentía diferente vacía, aburrida y cansada. Solo quería estar sola cuando la creída de Calira se me acercó con su enorme vestido amarillo. Todo chillón e innecesario.

-Hola Alysa veo que estás sola

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-Hola Alysa veo que estás sola..., Porque será. Tadeo te dejo por las chicas lindas?, O se dió cuenta de que no vales la pena.-

-Hola Calira- le dije de forma sarcástica intentado no meterle tremendo puñetazo o un insulto. -ehh, no, decidimos separarnos para que el pueda conocer más gente sin que yo los espante, pero estamos más unidos que nunca,... En realidad el me compro este vestido, el me peino y me ayudó a ponerme el vestido.-

Pude ver la ira de Calira en sus ojos. Yo bien sabia que a ella le gustaba MI mejor amigo desde que lo vio y eso causo una pequeña sonrisa en mi. Pero a pesar de estar enojada, comenzó a sonreir falsamente.

- que bien por ti Alysa veo que es un chico inteligente, sabe cómo criar a un perrito como tú-

-disculpa?- mi sangre me hervía nunca nadie me insultaba y se salía con la suya pero tenía que contenerme por Teo.

-si perrito, Tadeo en cuanto se pudo librar de ti, me vino a buscar para poder hablar conmigo obviamente. Y entre charla y charla me contó de la promesa que le hiciste de no pelearte conmigo. El me cuida mucho de ti. Sabe que una dama como yo no puede ser agredida por una bestia como tú. Y por lo que veo el perrito de Tadeo escucha bien porque hasta ahora no me haz insultado, buen perrito.-

Me empezó a aplaudir y a hacer sonidos con su boca como si fuera una mascota, y ya no me pude contener. Salte sobre ella y le empecé a pegar. Con sus gritos chillones, mucha gente se empezó a reunir alrededor. Tadeo llegó corriendo para agarrarme de la cintura y alejarme de Calira. Siempre la estaba cuidando el muy bastardo, tenía razón la presumida esa. El siempre velaba por ella, no por mi, si no por ella...

Todo se volvió insonoro y mi cabeza daba vueltas, lo único en lo que podía pensar mientras la gente hablaba de mi e insultaba, eran todas las veces que tuvimos una confrontación contra Calira, siempre pensé que Tadeo me protegía a mi de ella. Pero siempre fue al revés a la que protegía del animal que soy yo, era a ella.

Entre tantos gritos no escuchaba nada hasta que el me habló.

-Alysa- empezo a gritarme mientras me alejaba de la multitud alrededor. -Solo te pedí una cosa, que no hicieras un problema, SOLO POR HOY, me esforcé mucho por conseguirte ese vestido y mira como lo dejaste .-

El caminaba mientras me agarraba bruscamente de mis dos brazos, yo no podía hacer nada solo mire hacía abajo y empecé a llorar mientras caminábamos.

-Claro, eso es lo único que te importa. Vestir a tu perra con un bonito moño para que te alaben de cómo lograste domar a este animal- dije entre lágrimas.

Tadeo dejo de caminar en brusco y me solto, puso sus manos en mis hombros y me miró a los ojos. -de que estás hablando, yo nunca dije eso-

No me importo lo que dijo, yo solo quería desaparecer.

-ah Perdon, no solo eso te importa, también te importa la maldita Calira, eso te importa. Te importa protegerla de la bestia que es tu perra no?!- le dije gritándole a la cara mientras lloraba.

Tadeo me miro a los ojos, y se cristalizaron los suyos. Con un tono más suave y preocupado me dijo - Alysa que está pasando porque dices esas cosas-

Aproveche el descuido y corrí lo más rápido que pude a lo profundo del bosque inexplorado que estaba a solo como 2 kilometros de nuestra cabaña, nunca habíamos entrado más que unos cuantos metros por miedo a perdemos, pero está vez nada me importo corrí y corrí hasta que mis piernas ya no dieron, mientras escuchaba los gritos desesperados y cansados de Tadeo a lo lejos. El hacía lo posible por alcanzarme, pero no lo iba a dejar.

Por primera vez mi único deseo fue alejarme de ese maldito traidor hipocrita.



Despues de la tormenta-Lucerys VelaryonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora