📅 VIERNES 18 DE MARZO DE 2022
⏲️ UN MES DESPUÉS
Darcy sintió su garganta seca y un ligero temblor en todo su cuerpo. Estaba en el garaje de su escudería. A pocos metros del de Red Bull. A pocos metros de Max. Aún no lo había visto. Sabía que podría caminar unos cuantos pasos y lo vería. Pero, aún no era capaz. No estaba mentalizada para hacerlo. Y era cuestión de tiempo que ambos se encontraran. No podía estar escondida toda la vida. Y el paddock ni el circuito eran tan grandes.
A Barcelona no había viajado para los test porque tuvo bastante trabajo en la fábrica. Habían traído materiales y nuevas máquinas para la sala de fisioterapia y tuvo que estar encargándose de que todo funcionara bien. Pero a Bahreim si que había venido. Aquí llevaba ya dos días. Dos de sufrimiento pues sabía que no podría ocultarse más y que tendría que hacer frente a sus miedos. O más bien, hacer frente a Max.
- Me duele mucho el cuello –le dijo Charlie mientras ella le ponía calor en la zona y masajeaba sus hombros.
- Es por la tensión. Muchos meses sin competir –le dijo ella haciendo presión en la parte que él más necesitaba.
- No me distraigas a la fisio que a mi duele la mano derecha –le dijo Carlos mirando en la dirección de su amigo.
- Eso es por las pajas que te haces pensando en Valeria.
- ¡Charlie! –Darcy le dio una palmada a su amigo en el hombro conteniendo una carcajada- ¿aún no la has visto?
- No. Viene mañana para la carrera –le contestó Carlos con fastidio. Valeria, la jefa de Ingenieros de Motor del madrileño, aún no había viajado a Bahreim. Si es cierto que estuvo en los test de Barcelona, pero, una urgencia en Maranello, la había retenido allí durante todo este tiempo.
Darcy siguió tratando a Charlie y aguantando la cara larga de Carlos. Había visto a Valeria en la fábrica solo de pasada. Cualquiera diría que trabajaban juntas, pero, aquello era tan grande que ni oportunidad de presentarse. Era curioso que las dos compartieran los mismos amigos y que no hubieran quedado nunca los cuatro. Se prometió que si volvía a ver a la rubia, se presentaría ella misma e intentaría hacerse su amiga. Por lo que contaban Charlie y Carlos, era un encanto y muy simpática. Y necesitaba hablar con alguien del sexo femenino para desahogarse y llorar por Max. Y los dos pilotos de Ferrari no le servían para tal fin.
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1𝘿𝙀𝙎𝙏𝙄𝙉𝙔 (Runner 2)
RomanceMax Verstappen. Lo llaman el príncipe de hielo. Sin emociones. Sin amar. Con una vida planeada al milímetro donde no hay nada al azar. Pero, ¿que pasa cuando la pelirroja de ojos claros se cruza en su camino? ¿Cuando siente que ella rompe todas sus...