6:50 AMEl sol estaba por salir, era de mañana y un joven rubio de piel blanca justo estaba saliendo de aquellas sábanas blancas que cubrían su cuerpo desnudo.
Se encontraba adolorido, tenía marcas rojizas por todo su pecho, una que otra mordida por su cuello y espalda, el tipo con el que compartió la cama la noche anterior se había pasado un poco.Se vistió, tomo sus pertenencias tratando de no hacer ruido pero fallo en el intento haciendo que aquel sujeto se despertara somnoliento.
-¿Te vas tan temprano?-pregunto aquel hombre con una voz ronca.
-Si, no tengo nada más que hacer aquí.No dijo nada más, solo salió de aquella habitación de hotel.
7:30 AM
El rubio de ojos azules llegó a su departamento, seguía cansado con sueño y se sentía sucio, rápidamente se dirigió a su baño para tomar una ducha con agua tibia, quitó su saco, su camisa, después paso con su pantalón y zapatos para dejar al último su ropa interior que también retiro para después entrar a su bañera.
Su cuerpo ahora se sentía tan relajado, la ducha era su segundo lugar favorito, el primero era la cocina, dentro del baño podía relajarse, quitar el estrés y tener momentos de privacidad.
Pero no todo era felicidad ya que dentro de una hora tenía que ir al Baratie.
El Baratie era un restaurante muy famoso en la cuidad, su padre era el dueño pero el solo trabajaba como un cocinero más, con una paga normal como todos los demás trabajadores.
No tenía ningún privilegio por ser el hijo del dueño, aquel joven quería ganarse el dinero con su trabajo y nada más.
8:30 AM
Llegó a su puesto de trabajo, empezó con algunas órdenes y después de eso no había más por hacer ya que por ser muy temprano aún no había mucha gente.
Pasaron las horas y el lugar comenzaba a llenarse, al rubio le gustaba ver el lugar lleno, había parejas, jóvenes, mujeres, niños y adultos mayores, amaba ver las sonrisas en sus rostros cada que probaban la comida y más si el era el que la preparaba.
También amaba cada que algún ejecutivo o cualquier otra persona terminar su comida llamaba a algún mesero para que le presentará al chef y felicitarlo por su comida.
Muchas veces lo felicitaban por sus platillos y la gente se asombrada por qué el cocinero era tan joven.
Lo hacían sentir orgulloso y estaba orgulloso de si mismo.
3:45 PM
Su turno estaba por terminar faltaban solo quince minutos para que saliera, se había quedado a lavar los últimos platos que quedaban y justo se retiraría.
Zeff, un hombre serio con un carácter, que era preferible no hacerlo enojar, se acercó al cocinero con una mirada sería,
El rubio al sentir su presencia volteo a verlo dejando de hacer lo que hacía.
-¿Que quieres viejo? Ya estoy por salir.
-Puedes irte ya, pondré a alguien más que termine eso.
El joven no dijo más y acepto, acepto más que nada porque aún seguía cansado, quería llegar a su casa y recostarse en su cama, nada más.
secó sus manos y sin mirar a aquel hombre salió pero volvió a llamarlo.
-Sanji...-El rubio detuvo su paso.-cuidate.
Siguió su camino sin responder, era raro que lo llamara por su nombre, no dijo nada más, solo se fue.
-
Llegó a su casa, estaba tan solitaria como siempre, Sanji solo deseaba aveces compañía, que alguien lo recibiera al llegar, que a la hora de dormir lo abrazaran por la espalda o que sus mañanas de desayuno ya no las tuviera que pasar solo.
Pero recordaba el porque estaba solo, las personas eran crueles y era mejor así, estar solo sin que nadie tuviera que estarle jodiendo por cada cosa que hacía.
Que hacía, que decía, con quién salía o incluso como vestía.
Sanji era un hombre guapo, alto y masculino, podía tener a cualquier hombre que el quisiera a sus pies.
Y si, hombres, porque solo tenía una preferencia por ellos.
Las mujeres eran lindas, pero no se veía con una de ellas.
Era caballeroso, atento y educado.
Pero simplemente no deseaba a ninguna, ni sexual ni sentimentalmente.
En cambio a los hombres, había estado con muchos de ellos, su vida sexual era tan activa que aveces pensaba que era adicto al sexo, altos, delgados, morenos, blancos, corpulentos, etc, muchos ya habían pasado por su departamento.
El único defecto que tenían era que solo buscaban eso de sanji, solo sexo.
Nada más.
El rubio se habia enamorado algunas veces pero siempre terminaba decepcionado ya que no siempre terminaba de comprender que solo era sexo, se decepcionaba más que nada de el mismo por involucrar sentimientos donde no debía de haberlos.
En fin así era Sanji un chico solitario y enamoradizo que caía a los pies de chicos que le daban atención.
El sonido de las notificaciones de su celular lo sacaron de sus pensamientos.
Tomo aquel aparato y lo encendió viendo un montón de mensajes de su mejor amiga Nami.Nami:
Tenemos fiesta este fin, no puedes faltar.Avances odiaba las fiestas, porque en ocasiones se encontraba con antiguos amantes que no quería recordar y otras veces terminaba con alguno de ellos en una habitación.
Sanji:
no te preocupes,iré.Apagó aquel aparato y se recostó en su cama listo para dormir, solo esperaba que en aquella fiesta saliera con algo de suerte y no encontrarse con nadie o al menos no irse con nadie.
Espero q alguien lea esto
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Amigos en común
Fanfiction-¿ustedes son amigos? -No, solo tenemos amigos en común. Sanji un hombre enamoradizo con mala suerte en el amor y Zoro un hombre que no puede superar por completo a su ex pareja.