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8 meses de embarazo.

Si antes a Zoro le parecia irritante la mujer de cabello verde ahora le parecía insoportable.
Si no fuera por Sanji ya se hubiera vuelto loco desde hace mucho.

5:30 PM

A Zoro no le parecía mala idea llevar a Sanji a una de las citas médicas que tenia cada semana con Hiyori, por lo que ahora se encontraba a su lado de camino a la casa de la mujer peliverde.

Esta vez la cita le había tocado en la tarde por lo que no le costó tanto el levantarse.

Al llegar bajo del auto como siempre para tratar de ayudarla, su vientre era más grande que los meses anteriores, era obvio ya que en un mes mas estaría dando a luz.

Por lo que les hablo la doctora, los últimos tres meses del embarazo eran más riesgosos así que Zoro le puso el doble de atención.

-Hasta que llegas.-dijo la mujer.

-Se me hizo un poco tarde ¿esta bien?

La llevaba del brazo hasta el auto, pero esta al ver al rubio en el asiento del copiloto se detuvo.

-¿Porque trajiste al mesero?-pregunto molesta.

-No lo llames así, lo traje porque quería que me acompañará, si no fuera por el ya me hubiera vuelto loco por tu presencia.

-¿entonces porque insistes tanto en llevarme? Puedo hacerlo sola.

-Tengo que cuidarte.

-¿Porque? ¡Ni siquiera sabes si este niño es tuyo!.

-Hiyori, estas sola, yo solo trato de ayudarte.

-Nunca te pedí que lo hicieras, como tampoco te pedí que trajieras a este tipo.

Sanji al verlos discutir bajo del auto y camino hasta ellos para tratar tranquilizarlos, pero no se dieron cuenta de su presencia al estar muy ocupados discutiendo hasta que hablo.

-¿Todo bien? Zoro...-pregunto el rubio.

-Si, ya nos vamos, amor.-Dijo el peliverde al verlo.

-No voy a ir contigo.-dijo Hiyori cruzándose de brazos.

-¿no quieres hacerlo? Perfecto no vengas, arreglatelas sola.

-¿Que? ¿Vas a dajarla aquí?-dijo el rubio confundido viendo a Zoro.

-¿Porque no? No la voy a obligar.-el peliverde ya estaba bastante fastidiado.

En ese momento, la mujer empezaba a quejarse mientras tocaba su vientre, en su cara se podía ver el dolor que sentía, Zoro se acercó a ella rápidamente al ver como estaba apunto de desplomarce en el piso.

Estaba asustado, no sabia que hacer en ese momento, Sanji se acercó rápidamente para tratar de ayudarlos, Sanji estaba ahí, por lo que se calmo un poco.

-¡M-me duele!, Zoro me duele mucho.-se quejo Hiyori.

-Tranquila, te llevare al hospital rápido.

-N-no, ¡ya no aguanto!.-sus ojos empezaron a lagrimear, su cuerpo temblar y su sudor se volvía frío.

Zoro no lo dudo más y la tomo con ambos brazos para cargarla y llevarla con cuidado hasta los asientos traseos del auto para asi acostarla ahí.

Ambos chicos subieron igual de rapido para llegar algún hospital cerca.

Zoro trataba de no perderse, esto era importante por lo que dejo que el rubio lo guiará.

Minutos después llegaron y lo primero que Zoro hizo al bajar del auto fue gritar desesperado por ayuda aun con Hiyori en sus brazos, por lo que rápido fueron atendidos al verla escurrir sangre por sus piernas, todo fue tan rápido que al llegar a una puerta varias enfermeras le negaron el paso al peliverde, dejándolo ahí, asustado y muy confundido.

Amigos en común  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora