La Princesa Azula de la Nacion del fuego atormentada por sus actos en el pasado y negando todo intentaría huir de esa falsa máscara que su padre creó sobre ella para tener a el soldado perfecto y no una hija.
Con nuevas amistades para ella, aprender...
El ataque de Amon no había dejado a nadie indiferente. Un "Falso Avatar" había parecido y cada día alguien se unía a su causa de búsqueda de equilibrio.
El equipo Avatar se encontraba pensando t recuperándose de la paliza que habían recibido.
- No debería de ser posible nada de esto - diría Sokka muy confundido.
- Eso quedo claro las primeras cinco veces que mencionaste eso - diría Zuko algo molesto.
- Haber necesitamos descansar no podemos pensar de esta manera - diría en tono de Orden Aang.
Todos obedecerian y se dirigirían a sus respectivas habitaciones pero Azula seguiría a Aang ya que se veía realmente afectado.
Sin decir nada ambos se sentirían en la cama y se quedarían así por algunos momentos.
- No hace falta que lo diga solo dime - diría Azula.
- Creo que... desde que nací le tuve miedo a estos poderes sabía el peso que significaban huía de mis responsabilidades pero me di cuenta de lo necesario que era... - empezaría a contar Aang.
- Al final acepte lo que era y decidí detener a Ozai pero pensaba que estos poderes servirían para seguir con mi misión de equilibrar todo - se notaba algo de impotencia en la voz.
- Aang... saldremos de esta el solo es otro idiota con poderes - diría Azula en su tono característico.
- Gracias Azula... - diría dándole un beso en la mejilla a Azula pero su mirada seria seria por completo. _________________________________________
Por otra parte en la guarida de Amon se encontrarían todos los seguidores esperando a él que todos llamaban nuevo Avatar.
- Hermanos míos... hemos avanzado, cada día más cerca de nuestra misión - diría Un fascinado de el culto.
- Su actuación fue simplemente patética pensé que darían más.... - diría una voz entre las sombras.
- El plan era que mantuvieran ocupado al equipo Avatar mientras YO asesinaria a la princesa AZULA... - todos mirarían asustados a Amon.
- Lo lamento señor pero subestimamos demasiado a él equipo Avatar - diría uno de los hombres que tenia enfrente.
- Lo se... y es un lujo que no me puedo permitir.... - usando su control usaría tierra y metal para sujetarlo al piso.
La gente de alrededor se asustaría por la forma en la que estaban pasando las cosas pero no harían nada por la presencia de Amon.
- Ustedes serán los ejemplos y espero que los demás demás agradecidos por que la lección será tomada por ellos... - pondría sus dos manos en los rostros de ambos y con una mezcla de controles asesinaria de una forma brutal a los pobres hombres.
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