Memorias del Lobo que mato a la Abuela de Caperuza Roja

Capitulo 5

Memorias del Lobo que mato a la abuela de la bruja de Caperuza Roja.
Por RUI
Capitulo 5

.... Había una vez, una familia no deseada...

Mathiz estaba sola en aquella cabaña, nuevamente había tomado el grimorio prohibido de la abuela para estudiarlo y sin darse cuenta ella se quedó dormida. En la profundidad de su sueño su mente le trajo un viejo recuerdo.

Estaba la pequeña Mathiz en su cama abrazando una muñeca de trapo, el ruido de un frasco rompiéndose la hizo salir de su cama; soñolienta se dirigió a la cocina de aquella casa en donde su abuela recogía los trozos del vidrio roto.

- Que sucede abuela? Le pregunto tallandose los ojos.

- Mathiz ve a la cama.

- Quiero un poco de agua. La abuela suspiro, tomo un vaso y sirvió agua para la pequeña.

- Ya está, a hora vuelve a dormir.

La pequeña miró aquel libro de cuero sobre la mesa, nunca antes lo había visto por lo que le lleno de curiosidad.

- Nunca había visto este libro.

- Es un grimorio prohibido.

- Porque es prohibido?

- Porque hay hechizos que no deben ser utilizados.

- Y porque lo tienes tu?

- Porque yo soy su protectora.

- Y haz hecho algún hechizo de los que tiene?

- ... No. - La pequeña miró aquel libro y pudo leer una frase del mismo "Apoderacion de cuerpo". La abuela lo noto y cerró rápidamente el libro. - Ve a dormir.

La pequeña se extraño por su actitud así que solo respondió con su dulce voz.

- Si abuela... La pequeña obedeció y regreso a su cama.

Aquel hechizo estaba en el libro que ahora ella estudiaba en secreto, lo había visto sin darle importancia, sin imaginarse que ese hechizo sería usado en su contra.

El sol comenzaba a entrar por la ventana, deslumbrando el rostro de la joven bruja quien poco a poco iba despertando.

Ella realizó sus actividades cotidianas para luego salir al pueblo por algunas provisiones o eso era lo que intentaba justificar cuando la realidad era que quería ver al lobo pues no podía esperar hasta la noche, ese joven había despertado en ella deseos que quería saciar.

Marack estaba en el bosque cortando leña, poco a poco sus compañeros dejaron sus herramientas a un lado para tomar su almuerzo.

- Marack ya es hora de comer.

- Gracias, Grisha. Y tú almuerzo?

- Lo traerá mi hermana, ah mira ahí viene.

Una joven de cabello negro y cuerpo delgado apareció con una canasta llena de comida.

- Hola Marack te traje un poco de comida también.

- Que amable gracias... - La joven extendió un par de sandwiches para él, quien los tomo justo en el momento cuando una ráfaga de aire movió todas las hojas de los árboles, aquel aire iba impregnado de un aroma a hierbas secas. - Mathiz... - Susurró el lobo al percibir su aroma cerca, el volteo y vio a lo lejos como una caperuza roja se alejaba rápidamente en dirección al pueblo.

- Que extraño viento. Dijo la joven sacando más comida para su hermano.

- Si... Un poco... Marack se sentó junto a los hermanos para comer, pensando en lo que acababa de ocurrir pues no era producto de la naturaleza, fue provocado por el poder de aquella joven de caperuza roja.