Edén sonríe orgulloso cuando reconoce a la pequeña humana de pelo blanco que entra al despacho seguida de su Alpha. Le ha cogido cariño a esa chica, con esa forma tan suya de ser curiosa y orgullosa. Con esa forma de controlar a su Alpha aún sin saberlo.
- Aria ¡Menuda sorpresa!
- Eres un buen profesor Ed.- Sonríe le chica mientras todos se situan al rededor de la mesa de caoba.
Hunk toma siento en el ya conocido sillón, Edén cede su asiento con amabilidad a la Luna y se posiciona de pie al lado de Maika que no parece para nada contenta.
- Bien. Cuanto antes empecemos antes acabaremos.- La seriedad del Alpha intimida a Aria a la vez que la asombra. Como parece tan distinto al hombre que casi la besa en el gimnasio.- ¿Cómo van las construcciones al otro lado de la montaña?
- Todo en marcha.- Asegura la rubia.- En unos meses comenzarán las obras.
Aria no comprende de que hablan pero no se atreve a preguntar. Sin embargo Hunk nota su incomodidad y realiza un resumen rápido y disimulado.
- Crearemos nuevos pueblos y ciudades al borde de la frontera, tras las montañas del sur. Pueblos destinados a la agricultura que darán dinero y trabajo.
La peli blanca presta atención.
- Es la parte del territorio más cálido. Tiene sentido.- Es lo único que aporta.
- Exacto.- Interrumpe Maika - Si conseguimos producir nuestros propios alimentos tendremos más independencia. Dejando de comprar a los otros países.
Aria parece reflexionar. Es una buena idea, si. Pero seguramente haya muchas manadas disgustadas con esta decisión de Uskad por salir perdiendo.
- Si eso ocurre, las personas a las que compramos el alimento podrían enfadarse.
- ¡Eso es lo que intento explicarles!- Concuerda Edén con ella.- Pero Maika solo piensa en el dinero y al Alpha le da igual cabrear a gente a diestro y siniestro.
Hunk le recrimina con la mirada.
- No hacerlo por miedo a la reacción de los demás no es una opción.- Dictamina.- Mantenemos una paz con el Alpha Dhaakir por lo que no puede comenzar una guerra y si tiene algún problema llegaremos a un trato.
Aria suspira un poco más tranquila. Por lo menos es con el que mejor relación lleva de los arrogantes Alphas.
- ¿Con que manadas linda el territorio que pretendemos construir?- Pregunta la Luna sin poder dejar el tema atrás.
Hunk tiene la sensación de que ella ve algo que él no es capaz de comprender. Y eso, lejos de molestarle, le hace pensar que Aria tiene un lado de Luna verdadera difícil de ocultar.
Por primera vez le pesa la decisión de ocultárselo. Ahora, teme el momento en el que tenga que contarle la verdad.
- Con Treycia y Ewhana.- Responde obvia Maika.
- Bien. Siguiente punto del día, presupuestos para el año que viene.- Camia de tema rápidamente el peli negro.
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Aria se acomoda en su cama, con las piernas cruzadas y su ya pintarrajeado cuaderno entre sus manos. Huele al champú de Hunk y ya se ha puesto el pijama viendo el sol desaparecer por detrás del helado bosque.
Después de la larga y tediosa reunión parece tener más preguntas que respuestas. Hay algo que le rechina en todo ese proyecto del otro lado de la montaña. Pero no puede decir exactamente que.
Según internet, fuente fiable de información, los ingresos de Ewhana caerían en picado con estas reformas en Uskad. Uskad es un país rico y muchos viven de lo él compra. Sin embargo, fue cuando la extravagante rubia nombró Treycia que recodó el extraño comportamiento de Paul y Alexa en aquella fiesta.
¿Tendrá algo que ver con el plan del que tanto cuchicheaban? Tal vez solo sea paranoia.
Es extraño que, ante algo que podría perjudicarles, los países no hagan nada contra Hunk. A pesar de que el Alpha esté tan seguro de no detenerse ante nada a Aria no le parece correcto meterse incluso en una posible guerra por el proyecto. Sin medir las consecuencias.
Pero, ¿Es su lugar decírselo a Hunk? ¿Contará la opinión de una Luna de repuesto?
- Necesito más información.- Susurra Aria cansada de tantas preguntas dispuesta a responder alguna.
Si quiere ir a Hunk con una teoría conspiratoria como aquella, tendrá que estar segura de lo que dice, reunir pruebas, sacar información. Para no quedar como una loca ridícula.
Sin pensarlo demasiado comienza a escribir una carta. Una invitación para los hermanos Snyder para quedar. Una reunión amistosa donde pueda ver sus verdaderas intenciones o, por lo menos, tratar de mantener una paz por si las cosas se descontrolan en algún momento.
Si el Alpha de Uskad no quiere crear y mantener amistades, tendrá que ser ella la que cumpla ese papel.
Doblando el folio y metiéndolo en uno de esos sobres que a veces envía a su familia, sonríe satisfecha pareciéndole una buena idea. Queriendo destapar el plan de Treycia.
Está a punto de ir a ver a Hunk para pedirle que envíe la carta cuando, al mirar hacia la puerta, lo encuentra ahí.
Parece que lo ha invocado. Con la mirada clavada en ella y la respiración pesada. Apoyado sobre el marco como un cazador observando a su presa.
También se ha cambiado por una camiseta básica que se amolda a su cuerpo y lleva el pelo despeinado haciéndolo ver más joven y casi salvaje y haciendo estragos en la chica que no puede evitar reaccionar a él.
Hunk trata de mantener la calma, observando a Aria recién duchada, con el pelo aún mojado y ese bonito pijama rosa demasiado corto para su propio bien.
Ha tratado de retenerse cuando su lobo interior gritaba por continuar con lo que quedó a medias en aquel gimnasio. Es su mate, su olor por toda la casa le vuelve loco y la idea de poseerla es como la única medicina capaz de curarle.
Ha pasado demasiado tiempo sin ella desde que la encontró y, seguramente por que su celo se acerca, no puede mantenerse más tiempo alejado.
No se detuvo cuando sus pasos se encaminaron con prisa hacia el dormitorio, y ahora piensa cobrarse el beso y mucho más y Aria lo sabe con esos ojos azules dos tonos más oscuros clavados en ella. Que le erizan la piel como siempre.
Es hora de recuperar su dormitorio.
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Esperando a la Luna
WerewolfEn un mundo donde los hombres lobos reinan sobre el resto de especies, Aria no tiene mucho que opinar. Por mucho que quiera hacerlo. Por eso, cuando Hunk aparece para llenar el puesto de su Luna mientras espera su llegada, elige a Aria como remplazo...