[ Querido Taehyung ] -𝚃𝙰𝙴𝙺𝙾𝙾𝙺-

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–¡Jin mira, la masa ya quedó!.– Gritaba Taehyung con emoción.

Después de haberse enterado que Cookie era Jungkook no dudó en querer acercarse más, quería hacerle saber que pese a todo podía contar con él, sentía emoción en su estómago cada que pensaba en querer hacerlo feliz después de tantos años de no verlo.

–¡Te lo dije! Ahora ¿qué forma les quieres dar?

–¿Forma?

–Sí, mamá tiene cortadores de figuras, hay de corazón, de estrella, de conejito, de flor ¿cuál quieres?– 
Taehyung recordó que el animal favorito de Jungkook cuando eran pequeños eran el conejo.

–El de conejito.

–¿Y para quién son las galletas eh?– Preguntaba Amy con malicia en sus palabras, creía que eran para una chica.

–No te ilusiones mamá, son para mis amigos, quiero darles un presente por ser tan buenas personas conmigo.

Había puesto muchísimo esfuerzo en sus galletas y las empaquetó en bolsas  de plástico pero, apartó las que tenían forma de conejito especialmente para Jungkook, las decoró con muchos colores y chispas, había guardado todas en una caja que él mismo había hecho, era el regalo más lindo que jamás le hizo a nadie, estaba orgulloso.

Ese mismo día por la noche, mientras escribía pequeñas notas para sus nuevos amigos escuchó su teléfono sonar, era Jungkook.

/¿Hola? /

/¡Hola Tae! ¿Cómo estás? Lamento llamarte a esta hora pero me preocupó que no me mandaras un mensaje en todo el día, espero que todo esté bien/ –Tae no pudo evitar sonreír.

/No te preocupes, lo que pasa es que estuve algo ocupado haciendo algo para ustedes/

/¿Ustedes?/

/Así es, hice algo especial para Jimin, Yoongi y para ti/ –Dijo feliz.

/¿De verdad? ¡Ya quiero verlo!/

/Si todo sale bien, mañana mismo lo tendrás en tus manos/

/Es cierto, también te llamaba para eso. Jimin nos invita a su casa mañana, no se quiere sentir solo, ya sabes, su madre trabaja casi todo el día ¿quieres venir?/

/Claro, ¿a qué hora/

/Después de las tres, yo pasaré por ti/ –Volvió a sonreír, no podía evitarlo.

Pasaron alrededor de dos horas, pasada la media noche los chicos seguían hablando, se preguntaban cosas comunes como su color favorito, tipo de música, comida preferida entre otras cosas. Pero justo tocaron el tema del libro que había comprado Tae para Jungkook.

/¿Ya leíste el libro que te compré?/

/No, siendo sincero lo he olvidado/ –Dijo apenado.

/Cuando lo leas debes decirme qué te pareció/

/Lo haré, por cierto ¿cómo te has sentido estos últimos días?/ –Jungkook se estaba preocupando por él y eso le agradaba más que molestarle.

/Me he sentido muy bien, gracias/ –Mentía un poco, estaba algo pensativo e inquieto desde que se enteró de la verdad, pero tenía que mantener la calma.

/Me alegra mucho/

/¿Qué tal tú? ¿Cómo te has sentido? ¿Ha pasado algo nuevo con tu familia?/

/Pues honestamente la misma mierda de siempre, mi padre actua como si no existiera, aunque Hoseok ha cambiado ligeramente su actitud, ésta mañana me saludó y me preguntó cómo había dormido. No te voy a mentir, me sentí bien./ –Expresó contento.