〖𝐎𝐌𝐄𝐆𝐀𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐘𝐎〗 「Mi pequeño omega」

Capitulo 21

—¿Qué? —Te quedaste en blanco.

—Estoy embarazado —apretó tu mano —. Son cuatro.

—¡¿Cuatro?! —Hinata asintió.

—Son nuestros pollitos —Colocó tu mano en su vientre.

Colocaste ambas manos todavía con la sorpresa, en eso comenzaste a llorar y Hinata se sorprendió al ver como con cara de impacto llorabas.

—S-son míos... ¿Verdad?

—¡Es claro que son tuyo!... Fuiste mi primera vez —Murmuró al final.

—No me refiero a eso... Si de verdad me vas a permitir ser papá.

—¡Sí! —sonrió.

—Son nuestros pollitos —no podías creer que de verdad estuviera embarazado —. Lo siento... Lo siento mucho por irme, perdón —Le pedías perdón a ambos, a tus hijos y a Hinata.

—Yo te perdono... Pero... ¿No has estado con nadie? —quería saber que no te habías acostado con alguien.

—No, nunca haría eso...

—¿Entonces por qué hueles así? —su rostro mostraba gran preocupación.

—Es que... Estaba bebiendo unos tragos y una mujer se me acercó... Comenzó hablar y no se que dijo... No me gustaba su olor y como pegaba su cuerpo al mio, era desagradable, realmente quería que su cariño se parecíera al tuyo... —mumuraste —. ¡Y no digo que sean iguales!... Solo me gustaría un trato así de ti... Porque presiento que me odias mucho por marcarte, tampoco se si me odias por embarazarte...

Hinata se sobresalto al ver que estabas llorando más.

—No no no, no te odio, nunca lo hice, es que es demasiado para mí, digo mucho afecto me hace sentir raro... Cuando me tocabas me excitaba mucho y yo me sentía avergonzado —Hinata estaba tan rojo en ese momento —. Quería decirte “mejor no me toques porque soy muy raro ”, pero también quería seguir.

—Pero es que yo vi como te mirabas como asqueado...

—No no no —no sabias como convencerte de que no era así —. ¡Dios! ¡Yo me mojo solo con verte y no se que me pasa! —Dijo de golpe.

—¿Ah? —Le miraste.

—Incluso ahora —se cubrió el rostro —. Me siento tan apenado, me gusta demasiado tu aroma y cuando tu olor estaba mezclado con otro me sentí tan mal, me dolía el pecho...

—¿Estas mojado ahora? —fue lo único que le preguntaste.

—Que embarazoso... —se levantó quería encerrarse en el baño.

—Quiero ver —tomaste su mano.

—¡¿Qué?! —Sintió como si su rostro estuviera apunto de explotar.

—Muéstrame —Le pediste y vio esa cara a la que no le podía negar nada.

—Pero si me emociono demasiado... No se que le pasará a los pollitos —tocó su vientre.

—No creo que pase algo —Te acercaste a su rostro.

Hinata estaba dudoso y al final...

—Solo... Se gentil por favor, quiero que sea lento —Apretó tu mano.

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Takeo estaba afuera después de dos horas esperando, luego entró a la casa para verificar que todo estuviera bien, mientras camino por el pasillo de las habitaciones escuchó algo raro, algo así como un quejido.

«¿Está idiota hizo llorar a Shoyo? » pego su oreja con cuidado a la puerta.

—¡S-señorita p-por favor hágalo despacio —gimió al final —. ¡Ay! ¡Me gusta mucho!

Escucho... Takeo se separo de la puerta y camino al vestíbulo en silencio, estaba sonrojado y pensó en el auto.

—Voy a ir a tomar unas cervezas hoy...