Oye mi Amor || mechoa | ship FIFA

¿Arrepentirse o quedarse con las ganas?

Javier tenía en mente volver a trabajar en la empresa de Cristiano para desenmascarar cualquier cosa que le sirviera para la separación entre su matrimonio y así lo haría, contactó a Ramos para que le hiciera el favor de convencer a Ronaldo de una segunda oportunidad.

Ahora Javier había entrado a aquella fonda en donde había sido citado, Ramos ya se encontraba ahí y se levantó de inmediato en cuanto vió al Chícharo entrar.

- Bienvenido, Javier. Es un gusto volver a verte. - dijo entregándole una rosa blanca, la cual Javier aceptó con gusto, pero se sacó de onda por eso, pues se suponía que era un cita de trabajo, no de conquista.

- Ay gracias, que lindo, Sergio. - le sonrió y tomó asiento - ¿Y cuándo va a llegar tu jefe el Cristiano?

- Él no tarda, mientras podríamos platicar, hace tiempo que no charlamos desde aquella vez.

- Tienes razón, que descortés de mi parte.

Así pasó el transcurso de la comida y Cristiano seguía sin aparecer ahí y a Javier le estaba empezando a sonar raro el asunto éste.

- Bueno y acá entre nos, ¿Qué onda con mi tu jefe?, No es que sea un desesperado, pero enserio necesito de vuelta el trabajo.

- Pues la mera verdad, el jefe no va a venir, pero me dió instrucciones sobre ello, él no puede aceptarte por obvias razones.

- ¿Qué?, ¡No manches, Sergio!, Se suponía que ibas a hacerme el paro, mijo.

- Sí, pero estoy interesado en alguien más. - dijo coqueto.

- Hijole que poca, eso no se hace y menos a un damito, me hubieras dicho que ya tenías a alguien más para ese puesto.

- Creo que no me estás entendiendo, Javi, ¿No te han dicho que cuando te enojas te vez más guapo?

- Mira, Sergio, no me cambies la conversación... ¿Te parece?

- Estás todo sonrojado. - decía Sergio mientras acariciaba las mejillas rojas de Javier

- No, es que tomé mucho jugo de betabel. - respondió nervioso, debido a que Ramos cada vez se le encimaba más.

- ¿En serio?, a mí me encanta mucho el betabel.

- Pues sí tanto te gusta, ¿porque no te pides un jugo de betabel?

- Porque no se me antoja, lo que si se me antoja es darte un beso.

- Mira en primera yo nunca le haría eso a un amigo y en segunda yo estoy con alguien más. - era claro que lo que Javier dijo era mentira, pero lo que pensó al ver a Ramos como garrapata fue que después de un simple acoston éste ya se había clavado con él - ..¡Y hazte para allá o sino empiezo a gritar!

A Ramos no le importó, él iba por su beso y hasta algo más con Javier.

- ¡Ay, no!, ¡auxilio! - gritó.

- Disculpe caballero, ¿lo están importunando? - preguntó el mesero, quién era Rafael.

- Eh, no, no, mira, es más, tráeme una de esas enchiladas que tanto mencionas y un agua de horchata, por favor. - fue lo que dijo Ramos para ahuyentar al mesero y funcionó.

Javier estaba un tanto a la defensiva por si se quería pasar de listo con él, sí, aquella vez le había aflojado el camote, pero no era cuando Ramos quisiera, sino cuando Javier lo requiriera.

- ¿Sabes qué?, Ya mejor me voy, eso me pasa por salir con viejos payasos.

Javier se ofendió ante el comentario de Ramos y Rafael de inmediato volvió a tratar de defenderlo.