Era un día normal, la pareja había tenido la excusa de ver películas para realmente dedicarse a hacer otra cosa.
- Ay ya, Memo, ya deja de tallarme mis cachetes con tu pata de conejo que se me enchina el cuero.
- Oh, cómo te va a dar miedo si es mi patita de conejo de la buena suerte.
Un golpe en la puerta los alertó, se escuchaba mucho alboroto a fuera, como cuando los candidatos de la gobertura andan casa por casa haciendo si campaña.
- ¡Guillermo, abre la puerta que soy tu madre!
"Memo para los amigos, Guillermo cuando mamá está enojada"
Memo miró a Lionel asustado.
- Es mi jefa, ándale, vístete rápido, Leo. - le pasó su camisa y a su vez el mexicano también se vestía para recibir a su madrecita.
- Tranquilo, Memo, solamente es tu madre, no es cosa del otro mundo. - trató de tranquilizarlo dándole un beso - ¿De acuerdo?
- Ese es el problema, es mi madre, no la conoces aún.
- Entonces vamos, quiero conocer a tu mamá. - le sonrió y lo tomó de la mano, Lionel se sentía muy seguro y Memo era todo lo contrario como si su jefa fuera el mismo infierno.
Finalmente llegaron hasta la puerta, Guillermo suspiro y abrió dejando a la vista a su madre y a los cabrones de sus amigos detrás de ella.
- Mijito, no quería yo venir, pero me enteré que ya estás arrejuntado, tengo que conocer a mi yerno para saber sí o sí no es el indicado para ti.
- ¿Cómo supiste dónde vivía?
- Aquí el Andresito me hizo el favor de decirme y me trajeron hasta acá todos...¿Qué no te alegra verme?
Sus demás amigos miraban la escena tratando de no reír, puesto que Guillermo no esperaba a su madre, hace tiempo que no se miraban y la última vez que lo hicieron salieron de pleito por una inconformidad.
- Sí jefa, pero es que nos agarró en curva y no preparamos nada para darle la bienvenida. - rió nervioso.
- No, sí preparamos algo, Memo. - habló Lionel - Por favor, pasen, es su casa. Hice un postre de manzana por si gusta probarlo, suegra. - sonrió y extendió su mano para saludarla, pero el argentino fue ignorado completamente.
- Por eso no te apures mijo, me tomé la libertad de preparar unos chilitos en nogada a la carrera, no más para no llegar con las manos vacías y aparte como éste muchacho no es de aquí no ha de saber ni como hacer un huevo con jamón, ¿y que es eso del postre?, eso no es comida.
Ahora Leo sabía el porqué del nerviosismo de Memo, su madre era muy directa y hasta celosa con su hijo.
- ¡Jefa!, Es mi novio y su nombre es Lionel y si sabe cocinar, yo mismo le enseñé. - respondió orgulloso aún con su mano unida a la de él.
- No pues apenas está el agua pal' marrano. - miró de arriba hacia abajo al argentino.
- ¿Porque no se hace un arroz, doña Naty?, para acompañar los chilitos así bien ricos. ¿Le parece? - salió Andrés al rescate, ya que traía bien prensado a Lionel.
- Fíjate que sí, mijo. - le respondió - Ahorita se los preparo, siéntense están en la casa de mijo y yo los voy a consentir, también les voy a preparar una sopita de tortilla.
- Si quiere yo le ayudo con el arroz, doña Natalia. - le dijo Lionel.
- No me digas, si no sabes hacer un huevo, mucho menos te va a esponjar el arroz.
ESTÁS LEYENDO
Oye mi Amor || mechoa | ship FIFA
Hayran Kurgu"¡Chingue a su madre, Todo a $5 pesos!" Lionel que solamente salió de su casa para ir al tianguis a pensar cosas, jamás imaginó encontrar el amor en aquel puesto de rebajas. "Oye mi amor, aquí le damos lo mejor" ____________________________________...