¡No soy una barbie!

11. El tramposo Max

BMo

Después de las tutorías con Trevor, Scott me invitó a salir pasado mañana y bueno yo acepté ¿por qué no?

Llego a mi habitación y abro la puerta -con los ojos cerrados para no encontrarme con escenas como en el cuarto de Trevor- pero hay nadie así que prendo las luces. Miro el reloj que hay colgado en la pared indicando las siete con dieciocho minutos. Faltan exactamente cuarenta y dos minutos para el toque de queda a los alumnos que han salido -o sea Megan y Ansel- regresen y más de una hora para dejar de andar por los pasillos. Aunque no lo parezca Golden Beach es muy estricto con los horarios y si encuentran a alguien andando por esas horas sin autorización pueden hasta ganarse una anotación y si juntas tres anotaciones en todo el semestre... estas fuera. Expulsado. Todo eso lo sé porque Brian tiene sus contactos y de vez en cuando cuenta sobre algunos alumnos que les pasó eso y otras cosas peores. Como siempre: cada escuela tiene sus leyendas.

Abro mis cuadernos para ver si tengo que terminar de hacer alguna tarea, pero no, estoy libre. Por eso decido ponerme a ver algunas películas en Netflix. Voy por un poco de canchita y me acomodo en el puff que tiene la habitación frente al televisor. Después de revisar un poco en la computadora me decido por una maratón de sagas -como hacia cuando era más pequeña con papá: quitábamos todo lo que había en la sala a excepción de unos cojines, poníamos almohadas por todas partes y comprábamos un montón de dulces para comer- conecto el ordenador al televisor y selecciono la primera película (y una de mis favoritas) que voy a ver: Los juegos del hambre.

Sin darme cuenta ya era tarde y para colmo me había quedado dormida en mitad de Sinsajo parte uno. Me limpio la baba que se me ha caído por la posición, no piensen que siempre babeo cuando duermo. La puerta hace un crujido y veo hacia esta. Se abre de par en par mostrando a una -no tan sigilosa- Megan, echa una mirada hacia donde yo estaba y de inmediato me hago la dormida. Ella se lo cree y va directo a su cama. Espero a que pase un rato más y prendo las luces.

- ¡ay! - se queja mi compañera de cuarto como si hace rato estuviera durmiendo y se tapa la cara con la mano - ¿qué te pasa BMo? Anda a dormir. Me has despertado

- ¿en serio? ¿Tus cinco minutos de siesta? - no soporto la risa y suelto una carcajada al ver la cara que Megan pone ante mi comentario - te escuché entrar - explico al ver que ella no entiende - entonces... ¿qué tal te fue?

- de maravilla - Megan se tira en su cama soltando un suspiro (fase 1 de chica enamorada y/o ilusionada) - Fuimos al cine y vimos una película antigua romanticona [otro suspiro] luego fuimos a tomar un café, pero hacía calor así que mejor lo cambiamos a donas [otro suspiro] y después de eso llegamos a un parque y... y Ansel me pidió para estar

- ¿y qué le dijiste?

- que no

- ¿es en serio?

- ¡claro que no! Por supuesto que le dije que sí, saldremos otra vez el sábado [suspiro] BMo creo que estoy enamorada de Ansel

- eso está bien, pero con tal que no comiences a ver novelas de Fabio y empieces a leer "Romeo y Julieta" todos los días. Por mi está bien - contesto con una enorme sonrisa.

Es lindo ver a Megan enamorada, es como que parece tonta, pero una tonta buena y tierna, aunque yo no soy fan del romanticismo y odio "Romeo y Julieta" por ser tan imbéciles de suicidarse, o sea ¿que acaso no habían más personas ahí? En fin, a Megan (si no comienza con esas cosas) se le ve bien. Se le ve linda.

- ¿y tú qué tal con las tutorías? - me pregunta después de un rato y en que yo estoy sumergida en mis pensamientos - ¿BMo?

- ¿qué? - pregunto sacudiendo la cabeza y ella me vuelve a repetir la pregunta - oh bien, supongo