Dos segundos. Pablizza

32.- Papá.

Narra Pablo

Pasaron 3 días y Marizza casi no pasaba tiempo en casa y se la pasaba fuera con sus amigas y bebé ¿Que le pasa? ¿Ya no me ama cómo dice?¿Esta molesta? ¡¿Que pasa?!

Baje esta mañana y Maritza estaba haciendo planes con sus amigas, ya por 5ta vez o más. La quiero a ella y a mi bebé y no puedo estar con ninguno, ella es la mamá. Pero no los quiero, los amo.

-Mar... - espere a que colgara- ¿Podemos hablar?

-Si. ¿Qué pasa? ¿Todo bien?

-Conmigo si- me senté q su lado en el sofá -¿Con vos?

-Yo estoy perfecta.

-No me mientas, a vos te pasa algo.

-¿Porque lo decís?

-No haz pasado tiempo conmigo, siempre sales y ni me dejas al bebé, aveces siento que me ignoras. Siento que ya te aburriste de mi o que te arrepentiste. No entiendo nada, me siento mal novio y padre y no se ni porque. No se si te hice algo o te hice sentir mal pero quiero que me digas porque...- tomé sus dos manos y besé el dorso de la dereche- Puedo mejorar, así como lo hice antes, lo puedo hacer ahora pero decime porfavor.

-No se Pablo, no es problema con vos, sino conmigo. Me estoy sintiendo muy mal y aunque me dijiste que me apoyarias, yo no quiero ser otro peso para vos ¿entendes?

-Vos no sos ningún peso para mi Marizza.

-Perdón pero esque no se... Después de Benjamín me empecé a sentir rara y preferí distanciarme para no dañarte, perdón- me abrazo ya a punto de llorar.

-Esta bien amor, esta bien- la abrace más fuerte- Yo trato de entenderte pero esta vez no podía porque no sabía que había pasado pero para mi nunca serás un estorbo, y cada cosa difícil la superaremos juntos ¿ok?

-Esta bien- se limpio las lágrimas y me miró -te amo- Benja empezó a llorar

-Que pasa Benja...- los cargué -Ugh, te re cagaste. Voy a cambiarlo y vuelvo.

-Esta bien.

Lo cambié y cuando termine,baje y lo dejé en el corral de la sala.

-Ven- me senté en el sillón y Maritza se apoyo sobre mi pecho- Si me contas las cosas que pasan tendremos mejor comunicación.

-Si, amor, esta bien. Pero igual si te pasa algo me dices.

-Si, beso- now besamos- te amo.

-¿Queres jugar un rato con Benjamín?

-Si.

Marizza se paro, agarro al bebé y lo llevó al sofá.

-Ay, que bebé más lindo- le beso la frente.

-¿Y yo?

-Vos igual sos un lindo- nos besamos -pero no más que él.

-Eso es obvio.

Pasamos toda la tarde jugando hasta que Benja se quedó dormido. Fui a dejar al bebé a su cuarto con una camarita y Marizza se fue a la habitación. Después fui yo. Me tomé una ducha y me quedé en bóxer para dormir.

-Me siento cansado- me acosté en la cama bocabajo.

-No inventes, Pablo, me dices que no pasamos tiempo juntos y ahora dices que estas cansado. Sabes lo cansada que estoy yo.

-Por lo menos solo estoy cansado y no me desaparezco por días con mi hijo sin poder estar con él. Trato de entenderte pero también tengo derecho a estar cansado. Yo voy todos los días a trabajar. Sé que vos estas más cansada porque recién somos padres pero...