Dos segundos. Pablizza

67.- Erreway regreso.

Nos despertamos muy temprano para ir a la casa de Mia y Manuel. Arreglamos nuestras cosas y fuimos a su casa con nuestros hijos.

–¡Hola!– Mia nos abrió y la saludamos.– Chicos, Manuel está bañando a Cande. Bueno, la está vistiendo, no tarda, eh.

–Cande.– dijo Benja.

–¿Queres ir con Cande, Benji?–le preguntó Mia y asintió.

–Está bien.– Pablo dejó a Benja en el suelo y cargó a Isa que estaba en mis brazos.

–Oigan, pero ¿donde está Isa?

–La dejamos con mi papá porque el sonido le puede aturdir.– dije.

–Oh, claro. Ahora bajamos.– dijo Mia cargando a Benja.

Pablo y yo bajamos al sótano y dejó ahí el estuche de su guitarra.

–Hey, Mar.

–¿Qué pasa?

–¿Que te parece si ambos hacemos una canción?

–Uh, esa idea me encanta.– sonreí y me tomó de la cintura.

–Estas hermosa, mi amor.

–Che, calmate que en un momento llegan los chicos.– le di un pico y me soltó.

–Amor.

–¿Que pasa?

–¿La pasaste bien en Boipeba?

–Re. Me encantó. Además, no sabes, me sentí como en 5to grado de nuevo.

–Te amo.– nos besamos y tomó su guitarra.

–Pablo, ¿me podes tocar la canción que me tocaste en la propuesta?

–Para vos, lo que sea.– le besé la mejilla y comenzó a tocar.

En medio de la canción llegaron los chicos y los niños tenían crayón es y hojas. Supongo que para entretenerse.

–¿Están listos, chicos?– preguntó Manuel acomodando los micrófonos.

–Emocionados todos, más que nada.– dijo Mia.

–Bueno, dale. ¿Con cual empezamos?– pregunté.

–Con Vas a Salvarte.– dijo Pablo.

–Si, esa. A Candela le encanta.– dijo Mia.

Manuel comenzó a tocar y los niños se acercaron, se pusieron enfrente de nosotros y se sentaron.

1, 2, 3, waoh

Quieres salvarte, hay poco tiempo
Y no se puede sin algún riesgo
Deja girar a tu cabeza
No la detengas, tiene algún riesgo

Deja que grite, que ruja, que llore
Deja que pase, que todo pasa

Cuando esté en calma
Cuando esté quieta
Cuando esté limpia de tanta mierda
Vas a salvarte, vas a estar libre
Vas a encontrarte con la respuesta