Narra Pablo
Después de esa noche estresante y divertida cada quien volvió a su cuarto.
-Te amo Pablo, gracias por defenderme- me dijo después de ponerse la pijama y acostarse a mi lado.
-Lo haré siempre hermosa- puse un mechón de su pelo en su oreja y nos besamos.
[...]
A mitad de la noche ya estabamos dormido pero escuché un ruido en la puerta pero lo ignoré, pensando que fue algún vecino de habitación. Vi unas luces que se hacían cada vez más grandes. Las luces del cuarto no eran normales. Eran parpadeantes. Miré a Maritza para ver si era la luz de baño pero ella estaba dormida.
-¿Que pasa? - me paré de la cama- ¡¿Fuego?! - fui al baño y tire agua pero era imposible apagar esp.- ¡No se apaga!- la miré preocupado- ¡MARIZZA! - la desperté.
-¿Que pasa, Pablo, porque hace tanto calor?
-Fuego.
-Dejate de joder Pablo, encendé el aire acondicionado- tosió.
-Marizza parate- el fuego se propagó por toda la entrada del cuarto. Iba a ser imposible salir. La madera y el fuego comenzaba a crujir.
-¡Mierda! - se paro- ¿Por donde salimos, Pablo?
-Pasame las sabanas- le ordené y lo sacó rápido. Amarre todos juntos y jalé a Maritza. También me puse un pañuelo en la nariz y boca.
-Tendremos que salir por la ventana.
-¡¿Estas loco?! Es el tercer piso.
-No hay otra salida Marizza.... Veni- le amarré las sabanas por la cintura y las piernas- Con mucho cuidado- abrií la ventana y ella salió.
-¿Prometeme que saldrás vivo si? -me dijo adormilada.
-Lo prometo- nos besamos-, te amo- dije con lágrimas en los ojos.
Marizza iba bajando y llegaron Tomás y otro chico para ayudarla a bajar. Marizza se quedó acostada en el piso. Se veía mal. Bastante mal y muy preocupante, espero no haya inalado mucho. Sé que hay personas que les afecta más los gases que a otras.
-Pilar, ayudame, llevala lejos- le pidió Tomás y ella lo ayudó arrastrándolo hasta el pasto.
-Pablo- dijo en voz baja pero si la oí y cerro los ojos.
-¡Marizza!- grité y me deserperé más.
-Dale Pablo, baja con cuidado- me dijo Tomás y trajeron un pequeño colchón. Salté y caí justo en el colchón pero me dolió un poco el tobillo. Pero no es lo que importa.
-Marizza... - me levanté rápido.
-¿Estas bien? -preguntó el chico.
-Si, la llevaré al hospital.
-Dale, nosotros te ayudamos, yo manejo, es peligroso que vos manejes- me dijo Tomás y le agradecí.
-¡Vamos rápido!- exclamó Pili con Maritza en los brazos.
Tomás cargó a Maritza mientras Pilar trataba de calmarme.
-Sabemos que es fuerte, lo es mucho.
-Estuvo más tiempo que yo respirando aire tóxico. No creo que...
-¡Reacciona, Pablo! Lo que menos necesitamos es tu negatividad.
-Mi amor, cálmate.- pidió Tomás cuando llegamos al auto. Estaba llorando mucho, no podía controlarme. Pilar se subió atrás conmigo alzando las piernas de Maritza.
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Dos segundos. Pablizza
FanficEl odio se vuelve el amor más fuerte que los dos experimentaron. Cosas que jamás pensaron que pasarían. Y así comienza esta linda historia... Odio, amistad, amor, hijos. ¡wow!