Narra Maritza
Llegamos a casa y estaban esperandonos Mia y Manuel en la Sala con Benjamín.
-Pasame a mi bebé hermoso.- le dije a Mia yendo por Benja, antes de saludarla.
-¿Como estuvo todo?- preguntó Mia a mi lado y Manuel fue con Pablo.
-Bien, supongo. Eran restos del bebé- me senté en el sofá con Benja en las piernas y suspiré.
-Tranqui ¿si? - me dio un abrazo.
-Trato de.
-Bueno, nosotros ya nos vamos. Tengo cita con el ginecólogo.
-¿No era más tarde?
-Si, pero quiero ir antes. Voy en la semana 6, quiero ver si se ve.
-Mia plis, entiendo tu emocion pero no es que quiera estar con Pablo- susurré y me miró, confundida.
-¿Qué pasó?
-Larga historia pero luego te cuento, voy a bañarme- subí las escaleras con Benja en brazos. Entré a mi cuarto y me acosté un rato con Benjamín. Estaba jugando con él, mientras me arrancaba pelo y yo me quejaba pero me reía. Tomé sus manos y besé una y luego la otra. Me quedé viéndolo. Mi hijo salió muy lindo y tierno, igual que el padre. Me encantan sus ojos. Lo tomé y le llené la pancita de besos. Eso a él le da cosquillas.
-Ay, amor. Aveces tu papá es medio pelotudo pero igual lo amo. No sé si este bien que vuelva con él o no pero no sé que hacer. Lo amo de verdad pero siempre me esta lastimando, estoy harta de eso. Pero en fin, ya sabía que iba a salir algo mal... Lastima que no me di cuenta antes y ahora te tocará sufrir a vos. ¿O vos que opinas? ¿Me juego?- el sonrió sin entender nada y sonreíun poco.
-Maritza...- Pablo entró a la habitación y me di vuelta, bruscamente.
-No me digas. ¿Escuchando conversaciones de nuevo? No me sorprende de vos.- me senté y a Benja lo dejé acostado en la cama.
-Vos haces lo mismo eh- se sentó a mi lado- Amor... quiero decirte que de verdad te amo. Hable con Martín hoy y me dijo que no te perdiera. Estoy muy molesto conmigo pero ya dije lo que dije, para serte sincero eso ni lo quería decir. No te quiero perder. No quiero alejarme de vos. Sos lo más para mi, amor.
-Salió del corazón entonces. Lo que dijiste.
-No, simplemente hable sin pensar.
-Ni que me sorprenda eso.
-Porfavor Marizza... Ahora es cuando más debemos estar juntos. Soy un pelotudo y si quieres golpeame, pero nunca me dejes. Dejate llevar por lo que sentís. ¿Donde quedó esa chica que se jugaba por todo y por todos?
-En 4to grado. -respondí evitando su mirada y el puso su mano en mi cuello, acercándome a él.
-Acá esta- me besó. Me quedé paralizada pero le seguí el beso. Sus besos me ciegan y no me gusta eso. Debo ser más fuerte. Lo amo, pero amarlo es hacer que sepa cuanto me dolió.
-No Pablo, no- se separó- ¿Que tal que me vuelves a lastimar? - pregunté con lágrimas en los ojos.
-No lo volveré a hacer, lo prometo, lo prometo por Benjamín.
-Tengo miedo Pablo.
-Esta bien... Yo igual tengo miedo de abrir mi bocota.- dijo 6 no me pude resistir. Sonreí y lo acerqué a mi con mi mano en su quijada.
-Esque sos un pelotudo- lo besé. Me acercó más a él poniendo sus manos en mi cintura y cerrandolas para que no me pueda ir.
-Vaya, vaya- escuchamos la voz de Mia y nos separamos-, pues muy peleados no están, eh.- entró a la habitación- Subí a buscarlos, ya me preocupaban- río.
-Callate nena.- le dije.
-Como lo veo bien, vamos al gine.
-Si, esta bien. Cerrá la entrada cuando salgas plis.- cerré la puerta. Pablo me tomó de la mano 6 me volvió a acercar a él, sentándome en sus piernas.
-Perdóname por todas las veces que te hice sufrir, amor.
-¿Queres hacer al segundo bebé?- preguntó mirandome sólo a los ojos.
-No jodas, Pablo- me quejé parandome-, ¿solo querías volver para coger?
-No, no.- me tomó de la mano y me volvió a sentar- Para nada. Solo quiero que nos sintamos mejor con un segundo bebé.
-Jmm.
-Igual lo podemos dejar para otra noche.
-Si, Pablito, porque creo que no puedo, por ahora.
-Está bien. Ahora sólo hay que estar con Benja.- sonreí y nos pusimos a jugar con él.
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Dos segundos. Pablizza
Fiksi PenggemarEl odio se vuelve el amor más fuerte que los dos experimentaron. Cosas que jamás pensaron que pasarían. Y así comienza esta linda historia... Odio, amistad, amor, hijos. ¡wow!