Compre la monster junto con las gomitas, o más bien fueron un regalo por parte de la tía Magaly quien me las dió por qué me vio algo triste, camine con calma hacia mi sala jugando con la lata en mis manos.
Iba pensando en todo, si tenía miedo, si estaba nervioso, si estaba ansioso.Las cosas se complicaron desde que entendí lo que sentía hacia la mejor amiga de mi hermana, estaba completamente enamorado de esa linda cuica de ojos lindos y no lo Hiba a negar.
Mis pensamientos fueron interrumpidos al sentir una mirada sobre mi, era ella, la chica a la cual le escribía Miles de cartas pero todas terminaban en un solo lugar, en el basurero. Iba a caminar hacia otro lado pero fue imposible por el hecho de que ella me estaba tomando del brazo, no con mucha fuerza, apretaba pero no mucho.
— ¿Por qué te pusiste nervioso? — pregunto la menor con algo de timidez. ¿Por qué te fuiste así como así?, ¿Quien es Amanda?.
<< ¿Por qué tantas preguntas? >>
<< ¿Esta celosa? >>
<< ¿Se preocupo por mi? >>
<< Basta, si sigo así terminaré ilusionado >>
<< No quiero eso de nuevo >>
Me solté de su agarré sin ejercer mucha fuerza, para luego mirarla.
Primero, no sabía que decir.
Segundo, ¿Por qué esto parece una escena de celos?.
Tercero, ¿Está mal que me ilusione así?.
Vi que la Amanda se encontraba cerca por lo cual le entregaría sus pedidos y me iría a la biblioteca, no a leer, a dormir y pensar.
— ¿Por qué tantas preguntas? — le pregunte mirándola fijamente.
— pues te fuiste como si nada — respondió bajando la mirada.
— entonces, ¿Estás celosa? — volví a preguntar, con el tono que había preguntado quién era la Amanda había sonado como si estuviese celosa.
— ¿Yo? — se señaló nerviosa. No, cómo crees — se rió de forma nerviosa para luego tratar de irse.
La tome de la cintura evitando que se fuera, me importaba muy poco el hecho de que medio colegio nos mirará solo me importaba tenerla cerca.
— responde, waxita — digo mirándola. ¿Estás celosa de la Amanda?.
— no sé quién es la Amanda — respondió desviando la mirada.
Me acerque un poco a su rostro mientras la observaba, sabía que estaba nerviosa siempre que lo está muerde su labio. Tome de forma delicada su rostro haciendo que me mirará.
— bien, solo quería saber eso — mencioné para soltar suavemente su rostro y poder caminar hacia la Amanda quien se encontraba mirando la situación.
— ¿Problemas? — pregunto con una sonrisa, mientras estiraba su mano. ¿Las tienes?.
— si, ten — respondí para entregarle sus pedidos. Nos vemos más tarde.
Dicho eso simplemente me fui de ese lugar hacia la biblioteca, ¿Encerio fui capaz de hacer eso?.