Mis Dos Vidas

Capítulo Dos.

La familia de su padre siempre lo odio por el hecho de ser el heredero y tener sangre ajena y poco inglesa, pues su madre no era de Inglaterra.

Sin embargo, eran familiares y como príncipe, debía recibirlos en su palacio.

Después de ponerse el traje que su madre eligió para él, fue al salón principal donde se supone que se reunirían antes de ir al comedor.

Allí estaba su madre, quien ordenaba a sus empleados arreglar una que otra cosa o cambiar los manteles de las mesas.

Pero apenas vio a Taehyung, fue hasta él con un muy notorio enojo.

—Kim Taehyung, ahora mismo me explicas por qué hiciste eso en el almuerzo —exigió saber.

Taehyung se paró firme cuando ella llegó hasta él.

—Madre, no sé por qué quieren adelantarse al matrimonio si ni siquiera soy Rey y falta mucho para que sea coronado. No voy a casarme, al menos no tan pronto.

—No entiendes, Taehyung, las cosas no siempre salen como uno las quiere y es necesario prepararte para el futuro.

—No, lo único que quieren ustedes dos es su futuro, porque el mío no les importa nada. ¿Acaso tienen en cuenta que me quiero ir a Cambridge? Estoy seguro de que no, así que por favor, madre, no insistas en esto tan pronto.

La mujer frunció el ceño, ya bastante cansada de lidiar con su hijo. —Sabes que debes hacer esto. Tu padre está furioso; no sabes la vergüenza que nos hiciste pasar con la familia Murphy.

—Lo siento, ¿si? No quería quedarme ahí, no me sentía bien.

—¡Ya basta con tus juegos, Taehyung! ¿Acaso no entiendes?

—¿¡Y por qué no pueden dejarme vivir tranquilo!? ¡Ni siquiera soy el rey para tener que casarme! —exclamó, pero se arrepintió porque nunca le gritaba a su madre—. Lo siento por gritarte, pero no me puedo quedar callado, soy una persona y no su estúpido juguete.

La señora Kim suspiró y trató de calmarse.

—Hablaremos de esto después, ahora viene la familia de tu padre y debemos estar presentables —empezó diciendo con calma—. El rey está muy furioso y espero tengas una buena explicación a la media noche porque tendrás una charla con él —sin más que decir, se retiró del lugar.

Taehyung se tiró a un sofá, dando un largo suspiro. Se sentía abatido y cansado.

Todos los días eran cenas, reuniones y clases sobre política a los que debía asistir por ser el futuro rey de Reino Unido. Y ahora se sumaba el hecho de un matrimonio que no deseaba, ni mucho menos es con alguien que amaba.

—Hermano —escuchó la voz de su hermano menor.

Taehyung miró hacia él, sin ánimos para hablar.

—¿Qué quieres, Yeonjun? —preguntó fastidiado.

Llevó una mano hasta su cara, restregando esta sobre su rostro.

—¿Por qué ese mal genio? ¿Papá volvió a molestarte? —preguntó curioso y se acercó al sofá.

—No es de tu incumbencia, Jorge —le llamó por su otro nombre.

Yeonjun sabía que cada que le llamaba por ese nombre era porque estaba muy furioso.

—¿Te dijeron algo sobre el matrimonio? —preguntó.

—¿Tú sabías? —preguntó y le miró con una ceja alzada.

El menor tragó saliva. —Eh, sí, mamá me dijo. Se supone que en el almuerzo hablarían de eso con los Murphy.