14. Hilos

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—¿Lo has encontrado? —Tanjiro pregunto mientras desviaba un ataque de uno de los títeres e Inosuke le saca el pecho.

—¡Por supuesto! —grito señalando con una de sus nichirin astilladas en la dirección que sintió la presencia del demonio. Hiroko se apresura en acercarse al chico dándole una palmaditas en la cabeza mientras sonríe.

—¡Buen trabajo Inosuke! —ella alabo al chico jabalí, sintiendo como su rostro se convertía en un tomate debajo de su máscara. Ella le quito la mirada para alejarse de un ataque.

—Tenemos que acabar con ellos si queremos llegar allá—dijo Inosuke con brusquedad, Tanjiro y Hiroko sintieron como si sus estómagos se les cayeron.

—No... ¡T-tiene que haber otra manera!

—¡Definitivamente no los dejaré morir! —el chico de cabello granate suplica mientras saco el brazo de Inosuke para evitar que tome alguna decisión lamentable. La chica miraba a los muchachos. Inosuke quería cortarlos para poder completar la misión lo antes posible y ayudar a los demás, por otro lado Tanjiro no soportaba la idea de lastimar a más personas inocentes.

Tomo su nichirin con una mano temblorosa, mirando hacia otro lado. Un títere corrió hacia Tanjiro, que estaba a punto de atacarlo, pero el ataque fue bloqueado. Murata se paro con su nichirin desenvainada frente al pelirrojo, chocando con la espada atacante.

—Déjame a estos tipos y continúen —grito, Hiroko le rechina los dientes en desacuerdo, ella mira hacia su compañero quien tiene la misma expresión de desacuerdo.

Murata fue persistente en que continuaran, después de todo era un asesino de demonios igual que ellos.

—¡Gracias! ¡Enserio que lo apreciamos! —Tanjiro sonríe y se pusieron en sprint, mientras su compañera tomo del brazo al jabalí, llevándoselo, lo que le hizo chillar.

Hiroko vio más telarañas en el camino. Este bosque era realmente espeluznante.

—¡Te golpeare cuando vuelva! —Inosuke grita, haciendo que la chica presione su agarre sobre él. No quería pensar así, pero solo su toque logro acelerarle el corazón.

—¿Seguros de que vamos por buen camino? —Tanjiro e Inosuke asienten con confianza.

—¡Mis sentidos nunca están mal! —se jacta mientras esquivan los hilos que intentaban pegarse entre ellos. Hiroko sintió como uno de los hilos se pegaba en su brazo y lo corto rápidamente, tartamudeando. Inosuke se da cuenta de esto y decidió agarrarle la mano.

—Gracias... —murmura y él simplemente resopla. La frecuencia de los hilos aumentaron a medida que continuaron caminando, lo que significa que se estaban acercando cada vez más al demonio responsable.

Hasta que se tomaron con un nuevo grupo de asesinos, había una chica parada enfrente con su arma incrustada en el cuello de otro, les ordenó que no se acerquen por su propia seguridad mientras que las lagrimas deslizaban por su rostro mirándolos con pavor y jadean por ayuda, suplicando por favor que llamen a alguien de rango superior.

Los hilos que estaban unidos a ella brillaban con dureza a la luz de la luna. Todos sus movimientos vacilaban durante un minuto sólido mientras el trío mira a la chica sollozando, antes de que ella salte hacia ellos. Su nichirin hace cortes al aire, pudiendo a penas escapar de su ataque.

—¡Corran! —grita mientras ataca. —¡Estoy siendo controlada! —suplica mientras continúa cortando.

De rente, los hilos levantaron más títeres, sus huesos se deformaron de manera repugnante y la sangre cubrió pobres rostros.

—Por favor... mátame. Mis huesos... están perforando mis órganos. No puedo sentir mis brazos o piernas, pero aun siento cada gramo de dolor y es muy intenso, ya no lo soporto —Uno de ellos gorgotea mientras levanta su katana con una mirada dolorosa en su rostro. Ella se para con una mirada angustiada en su rostro, mientras Inosuke avanzó determinado a cumplir la petición del joven.

Contigo (Inosuke x tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora