16. Sensación de Mariposa

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—¡Aquí hay dos más!

—¿Esa cosa es un humano? —Levanto un poco la máscara del chico —Mierda, si es un humano

—¡Traigan dos camillas! —Grito otro.

Hiroko recuperó la conciencia por un segundo, antes de darse cuenta de lo que estaba sucediendo. Los llevaban en camillas junto a otros cazadores. Levantó la cabeza tanto como pudo, mirando frenéticamente, buscando al chico con cabeza de jabalí, pero un pozo se formó en su estómago mientras miraba a su alrededor, incapaz de detectarlo.

De repente sintió una mano entrelazada con la suya y miro cuidadosamente hacia abajo. Sus ojos amatista se encontraron con los de su maestra, Shinobu.

—Tranquila querida. Hicieron un excelente trabajo sobreviviendo, todo estará bien —Dijo la superior con una cálida sonrisa mientras que Hiroko se limitó a decir ni una palabra, sintiendo un gran ardor en todo el pecho —No necesitas decir nada —Volvió a sonreír —Tu amigo de la máscara de cerdo está bien. Llévenlos a mi finca, por favor.

Y ella inmediatamente sintió un gran alivio al escucharla decir esto. Estaba a salvo... eso era todo lo que importaba, su cuerpo comenzó a sentir una gran tranquilidad y por din podía descansar, cerro los ojos para volver a conciliar el sueño.

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Mientras tanto a Tanjiro lo llevaron con el resto de pilares y el patrón para juzgarlo por romper las reglas de los cazadores de demonios, pero Nezuko demostró ser digna de merecerse una oportunidad con los humanos, terminando rápidamente su juicio, a lo que Shinobu pidió cortésmente que los llevaran a su Finca a ellos también.

—Llévenlo a mi finca por favor —Sonrió la peli morado.

—Señorita Kocho. Quisiera hacerle una pregunta, ¿En su finca aún se encuentra la joven Tsukiyono?

—Si, ¿Por qué la pregunta?

—Ya veo —Dijo sonriendo —Joven Kamado. Mándale mis saludos a la joven Hiroko Tsukiyono y dile que su viejo amigo Kyojuro Rengoku pronto iré a visitarla.

«¿Este tipo conoce a Hiroko?» Miro confundido al pilar, mientras dos asistentes se acercaron para llevárselo bajo la orden de Shinobu.

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Al día siguiente Hiroko se despertó de su largo descanso, notando que gran parte de su cuerpo estaba vendado, seguramente por las cicatrices o algún posible hueso roto, por lo que probablemente pasarían años antes que pueda pelear nuevamente. Aun así se alegró de que por fin estaba de vuelta en la finca mariposa. Giro un poco su mirada hacia su izquierda y ahí estaba Inosuke, descansando con su mascara aun puesta después de la ardua batalla de anoche. Sin pensarlo mucho se puso de pie, inclinándose con cuidado en la orilla de la cama de su amigo.

—¿Inosuke? —Pregunto la fémina, sin recibir ningún tipo de respuesta.

—Ellos aun no despiertan, esperemos lo hagan pronto —Dijo una chica de coletas desde la puerta —Me alegra que por fin despertaras, pero también deberías descansar.

—Muchas gracias Aoi, tratare de descansar pronto —Respondió, mirando la habitación, sin ver en ninguna parte a su amigo Tanjiro —¿Dónde esta Tanjiro? —Pregunto exaltada y preocupada de que no haya sobrevivido.

—¿Tanjiro? ¿No es el cazador que llevaba una niña demonio con él? —Asintió la cabeza. —Lo están enjuiciando, porque según las reglas de cazadores, ya sabes, está prohibido proteger a los demonios. O es lo que me dijo Kanao, así que Shinobu llegara un poco tarde también.

Contigo (Inosuke x tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora