No comprendia la razón por la que a Stiles no le agradaba Jackson, había sido un chico realmente dulce y bueno conmigo, siempre era muy atento.
— Dime que estás bromeando — Lidia cerró su casillero antes de girarse hacia mi.
— No, no lo hago — la chica bufó.
— Jackson Whittemore ¿En serio? De todos los chicos de la escuela ¿Justamente elijes a Jackson Whittemore?
— Es lindo.
— Y un completo idiota — rodé los ojos — te lo digo en serio, créeme yo también tuve un enamoramiento hacia él y todo era color de rosa, hasta que la realidad me golpeó en el rostro y vi como era.
— ¿Y como era? — caminé a su lado.
— Controlador, celoso, se enoja con facilidad, odia que seas más inteligente que él — enumeró levantando los dedos — y por Dios Edd, eres mucho más lista que él.
— Pero ya he dicho que si a la cita — dije — sería descortés decirle que ahora no.
— Bien, ve a esa cita y después adiós — asentí — ¿Ya se lo has contado? — señaló con la barbilla al castaño a mitad del campo.
— ¿Estás loca? Si él se entera de esto no va a dudar en asesinarlo.
— ¿Él? ¿A Jackson? — cuestionó enarcando la ceja — a menos de que tenga fuerza sobrehumana, dudo mucho que siquiera pueda ganarle a una mosca.
— ¡Oye! — la pelirroja soltó una risita — aunque no lo parezca Stiles es muy hábil.
— ¿Hábil? Tal vez ¿Fuerte? Mmmm, lo dudo realmente.
— Genuinamente creo que una persona solo necesita la motivación correcta para tener la fuerza suficiente — respondí.
— ¿Y cuál sería la motivación correcta para que alguien como Stiles se vuelva fuerte? — preguntó.
— No lo sé, quizás que lastimen a alguien que le importe o a la chica que le gusta — dije,
— ¿Y tú en cuál de las dos opciones entras?
— Soy su mejor amiga desde los 5 años, creo que es obvio que entro en la categoría "persona que le importa" — la pelirroja me miró — ¿Qué?
— ¿Detecto decepción en tu voz?
— ¿Qué? ¡Por supuesto que no! — negué con la cabeza rápidamente — ¿Tu y Derek se están enviado mensajes para no dejarme de preguntar sobre si me gusta Stiles? — a la sola mención del chico note como Scott giraba su cabeza hacia nosotras.
— No, es solo que es extraño tu relación con él — dijo — son realmente cercanos pero jamás se han besado.
— Nunca dije que no lo he besado — Lidia me miró sorprendida — de hecho él fue mi primer beso.
— ¿En serio? ¿Un primer beso? Eso no cuenta.
— Cuenta para mí.
— ¿A qué edad? — se cruzó de brazos.
— A los 9 — las chica bufó — ¿Que tiene de malo?
— A los 9 años aún ni siquiera sabes si te gusta el color rosa o el morado ¿y tú estás intentado justificar que no te gusta con ese argumento? Por Dios Edelweiss, deberías intentarlo nuevamente — negué con la cabeza — ¿Por qué no?
— Comencemos con que él no me gusta.
— No necesita gustarte para besarlo — dijo — ¿Qué más excusas tienes?

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Andando entre lobos.
Science FictionBeacon Hills es un pequeño pueblo escondido en California, algunos lo llamarían un pueblo tranquilo pero a sus habitantes no les parecía igual, algo definitivamente había cambiado por ahi, comenzando por los aullidos de lobos y los avistamientos de...