Albedo en DxD

Capitulo 11: La tormenta. (1)

Capítulo 11:

La tormenta parte 1.

Ciudad del vaticano. Los ciudadanos y los turistas caminan por las concurridas calles. Parecía ser otro día tranquilo con un buen clima, grandes y hermosas nubes de color blanco se movían lentamente en el hermoso cielo de color azul. Lo que llevo a algunas personas a tomar fotos del hermoso paisaje. Mientras una de esas personas apuntaba su teléfono hacia el cielo, noto que una nube se comportaba de forma extraña ya que esta se movía demasiado rápido y no perdía su forma.

-¡¿Qué es eso?! -Un grito vino desde su espalda. Era un hombre atrás de el que señalaba otra nube en el cielo.

Las personas detuvieron lo que hacían y dirigieron sus miradas hacia el cielo. Mientras las nubes parecían descender a gran velocidad hacia ellos. Presa del pánico las personas empezaron a correr para alejarse. Pero no fue su caso, el saco su teléfono y empezó a transmitir. Al ver esto algunas personas se unieron a él.

Un fenómeno meteorológico, pensaron algunos. Es una rara oportunidad tengo que grabarlo, pensaron otros. No podrían estar más equivocados. Lamentablemente solo se dieron cuenta de esto cuando la nube más grande, empezó a parpadear como si fuera un glitch, como si hubiera un error la nube fue remplazada por una nave voladora gigantesca, detrás de ella las demás nubes se convirtieron en lo mismo.

Con un fuerte estruendo y dejando una estela, las naves pasaron a gran velocidad por encima de sus cabezas con dirección a La Basílica de San Pedro.

Ninguno de los presentes se movió ni dijo una palabra todos parecían estar en shock el presenciar algo digno de la ciencia ficción. Solo pudieron moverse cuando el suelo empezó a temblar y escucharon grandes explosiones a la distancia.

***

El Palacio Apostólico, los altos mandos de la iglesia católica se reunieron de emergencia. El papa y sus cardenales tenían expresiones oscuras en sus rostros.

-¡Quiero un informe! ¿Sabemos quién nos está atacando? Y ¿Cuántas de nuestras sedes están bajo ataque? -dijo el papa, mientras intentaba mantener el equilibrio por las constantes sacudidas y explosiones.

-Mi señor, no sabemos quiénes son, nunca habíamos visto sus armas ni sus técnicas, sus naves atravesaron todas las barreras sagradas. Nuestros investigadores sugieren que quizá no estén usando magia y es por eso que atraviesan tan rápido nuestras defensas. -dijo con preocupación uno de los cardenales.

-¡Ridículo! Esa potencia de fuego no puede ser producida con tecnología. La fuerza sobrehumana de sus soldados debe ser producto de la magia. -El papa grito, por lo que los presentes se callaron.

Al notar que todos dejaban de hablar otro de los cardinales hablo.

-Con respecto a las sedes bajo ataque. Señor todas están siendo atacadas. -dijo el hombre.

-¡Que! ¿Todas las sedes del vaticano? -Sintiendo que le faltaba el aire, el papa tuvo que sentarse por un momento. Pero las palabras que salieron de la boca del cardenal empeoraron aún más su estado.

-Las sedes del vaticano no señor, sino todas las sedes a nivel mundial de la iglesia católica están siendo atacadas, ya hemos perdido contacto con más de la mitad de nuestras sedes a nivel mundial y en el caso del vaticano solo las tres iglesias más grandes están en funcionamiento.

***

-¡Maldición! Central ¿Me escuchan? Estamos bajo ataque, ¡nuestras armas son inútiles contra estos bastardos! Y nuestro poder sagrado está siendo absorbida por esos cristales de color púrpura ¡Necesitamos refuerzos! Por favor-