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El omega siente una humedad en el cuello, es leve, pero caliente y le provoca escalofríos. Abre los ojos perezoso y gira un poco el rostro.

Yoongi está dormido y con los labios pegados a su cuello, su relajada respiración le estremece esa zona y un ronroneo se le escapa. La mano del alfa lo abraza aún más, sujetándolo del abdomen y propinándole calor.

Jimin está por soltar un gemido de gozo, pero el orgullo lo detiene.

Eso no sería muy rudo y sexy de su parte. Tiene una reputación que cuidar.

Vuelve a cerrar los ojos, pero el dedo índice de Yoongi haciendo figuras en su abdomen lo detiene. Al parecer el alfa está despertando. Corazones, círculos, flores y muchos espirales. Yoongi le obsequia esos mimos sin siquiera estar completamente despierto.

Minutos pasan y contrario a lo que pensó, el confort en las caricias le invita a un sueño profundo nuevamente.

—No te duermas —le pide contra la oreja y Jimin es extraído del mundo de los sueños inmediatamente. Yoongi aspira el olor a amapola del omega y se percibe inmediatamente relajado, jamás había olido a un omega con esa esencia tan peculiar. Su alfa ruge extasiado ante el singular aroma.

—Sigue acariciando mi panza y guarda silencio.

Yoongi ríe gutural y Kitty siente su interior vibrar. Mmm... Se supone que no debería pasarle eso.

—Aún falta terminar lo de la madrugada —besa el cuello del chico y al no sentir o escuchar oposición, continúa depositando besos pequeños por la columna vertebral marcada bajo la piel.

—Oh, mierda, hueles a perro en celo —finge molestia mientras siente como los dos dedos largos se hunden en él. Contrario al disgusto que pensó sentiría, sus muslos temblorosos le informan lo contrario—. Oh, mierda, Yoongi —comienza a masturbarse y siente un tercer dedo entrometido—. Usa el lubricante, perro tonto.

Mareado y con las piernas débiles, Jimin es cargado hasta otra habitación, cuando entran en ésta se da cuenta que es el baño, hay una tina beige espaciosa y vacía.

—No pareces tan fuerte, alfa —comenta al ser cargado sólo con una mano hacia la tina debido a que con la otra abre el grifo del agua caliente para comenzar a llenarla.

—Pesas nada, yo no soy fuerte, tú eres una pluma.

—Sí, me esfuerzo por lograr tener esta figura —habla voluble mientras Yoongi lo recuesta en la fina cerámica de la tina, Jimin siente sus nalgas mojadas por el agua caliente llenando la tina.

—No fue un halago. ¿Cuánto pesas, Kitty? —le acaricia la cintura.

—No te importa.

—Claro que sí, portarás a un nuevo ser en tu interior y tienes que tener unos muslos grandes para sostenerlo, unos brazos fuertes para cargarlo y buena salud.

Jimin calla, se quedó sin argumentos, sinceramente no había pensado mucho en el futuro, le aterra, pero eso será problema del Jimin dentro de nueve meses.

—Mi exnovio era un chico muy voluptuoso, tenía un gran culo y una linda barriguita que podía usar de almohada —sonríe mientras habla de él, parece realmente feliz, indicando que terminaron en buenos términos.

—Felicidades.

Yoongi ríe alto por la respuesta seca y molesta. Se arrodilla y queda entre las piernas separadas de ese omega descarado y en ese momento malhumorado.

—Oh, no te enojes, te seguiría follando aunque fueras puros huesos, al parecer las pocas calorías que ingieres se te van al culo, bendita sea tu genética.

¡Kitty quiere un bebé! «Yoonmin» - FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora