Serendipia

Capítulo 20

Narra Flavia 

Después de hablar un rato con Javiera me ofrecí a llevarla a su departamento y aunque ella se negó tuve que insistir, estaba oscureciendo y no iba a dejarla sola. 

La dejé en su departamento y volví a mi casa, apenas entré me llegó un mensaje de Isidora. 

*– Hola, ¿Estás en tu casa?* 

*– Acabo de llegar de la pega, ¿pasó algo?*

*– No, así paso por tu casa* 

*– Okey, ven* 

Subí a cambiarme de ropa, realmente no tenía muchas ganas de ver a Isidora hoy pero no me quedaba de otra. Volví a bajar y escuche el timbre sonando, abrí la puerta para dejar entrar a Isidora. 

– Hola, pasa 

– ¿Esa es la forma de tratar a tu polola? 

– Perdona– me acerque a ella y bese su mejilla

– ¿Todo bien en la pega? 

– Si– camine a la cocina para tomar unas copas 

– Saliste más tarde hoy

– Una reunión de último minuto 

– ¿Y era muy importante esa reunión?

– No se, normal supongo

– Pase por la empresa hoy y me dijeron que estabas con una mujer 

Me quedé de espaldas a ella tratando de evitar decirle que Javiera había estado en la empresa, ni siquiera sé si ella la conoce de cara pero tampoco me interesa averiguarlo. 

– Amm si, una amiga pasó a saludar 

– ¿Una amiga?– asentí mientras servía el vino, si sigo asi voy a terminar volviéndome adicta para evitar mirarla a la cara– ¿conozco a esa amiga? 

– ¿Esto es una escena de celos?, porque si es así te recuerdo que no funciona conmigo 

– No, solo me parece raro 

– ¿Raro? 

– Si, conozco a todas tus amigas y a esta me la ocultas como si fueran algo más 

– No, ella es mi amiga y pasó a la empresa para… invitarme a una presentación que tiene mañana 

– ¿Una presentación?, ¿de que? 

– Va a cantar en un bar y le prometí que iría 

– Que raro tu Flavia, nunca te ha interesado la música 

– No es raro, la conocí cuando ella se presentó en un bar al que fui con mis hermanos y me gusta como canta, además ya tiene un contrato profesional 

– Entonces te acompaño 

Mierda, mierda, ¿y ahora qué le digo?, no puedo llegar a la presentación de Javiera con Isidora, sería prácticamente como burlarme de ella en su cara. 

Tomé todo el vino de mi copa en un solo trago y volví a llenarla rápido. 

– No es necesario que me acompañes 

– ¿Por qué no?, podemos tener una salida de pololas y de paso me presentas a tu amiga 

– No creo que sea buena idea Isi