Bella.
Alessio ingresa al hospital en estado grave.
¿Cuál es su condición?
Sufrió una contusión cerebral que originó un sangrado en el cerebro por lo cual tuvo que ingresar a una cirugía de emergencia para evitar daños a su sistema y evitar un resultado fatal.
Pero eso no fue lo único, una de sus piernas quedó prensada por el choque, su rodilla sufrió severos daños así que al mismo tiempo mientras operan su cerebro, hay un equipo de trauma y ortopedistas operando su rodilla izquierda.
Lo que ha sucedido en las últimas horas se siente irreal. Se siente como estar en una película de terror, donde no sabes en realidad que es lo que pasará a continuación. Mi mente es una maraña de pensamientos confusos que no puedo entender, es como si de cierta manera me encontrara en medio de un desierto, sin saber qué dirección tomar.
Llevamos casi tres horas aquí, sin que nadie pueda decirnos algo, me siento agotada, como si algo me hubiese drenado todas y cada una de las fuerzas que poseía. Las náuseas no ayudan mucho, cierro los ojos en un intento de recuperarme, de no romperme justo ahora.
Jacob se mantiene a mi costado, sostiene mi mano con firmeza, dándome la fuerza que ahora necesito más que nunca. El médico dijo que la cirugía podría tardar bastante tiempo, pero mantenía la esperanza de que alguien saliera a decirnos algo, cualquier cosa para acabar con la angustia que comienza a volverme loca.
—Jakey —hablo sin mirarlo, con la vista fija en la pintura blanca del techo.
—¿Sí?
—¿Qué voy a hacer si todo esto resulta mal? —muerdo mi labio inferior, mis ojos arden cuando las lágrimas se agolpan, trato desesperadamente de contenerlas pero no es un resultado exitoso —¿qué voy a hacer si lo pierdo?
—No vas a perderlo —asegura.
—Todo iba tan bien, Jakey —sollozo sintiéndome tan destrozada —no se supone que esto resultara así. Se supone que estaríamos celebrando, que tendríamos una gran celebración por su victoria y luego él se estaría preparando para el GPI. No se supone que estemos aquí, nada de esto tendría porque estar pasando.
No obtengo una respuesta verbal, los brazos de mi hermano me atraen hacia él, se sienten como una especie de refugio en el que me puedo permitir ser tan frágil como necesito.
Me refugio en su pecho, tenerlo conmigo se siente como una especie de salvavidas, algo que me mantiene a flote para que no me sumerja por completo.
—Escuchaste al médico, tienen un pronóstico alentador —sus brazos se afianzan a mi alrededor —él saldrá de esto, es un campeón, ¿o no?
Se aparta, toma mi mentón, prácticamente obligándome a mirarlo a la cara.
—Además, tiene una familia a la que no puede abandonar —mi labio inferior tiembla, las lágrimas vuelven quemando mis ojos y aumentando la sensación de ardor —te ama demasiado como para abandonarte, ustedes dos son unos luchadores, esto no va a acabar con él.
—¿Lo crees?
—Estoy seguro —sonríe con confianza —y él te necesita fuerte, necesita que seas esa Bella que no se deja vencer, necesita que seas la chica que conoció, fuerte y segura, dispuesta a todo.
—No creo poder...
—Claro que puedes, ¿recuerdas que es lo que papá siempre decía sobre ti?
Sacudo la cabeza en una negativa, Jacob resopla pero sonríe un par de segundos después.
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Un desastre perfecto.(SL #4)
RomanceElla, la princesa de la danza. Él, el rey de las carreras de autos. Dos accidentes. Dos sueños que amenazan con romperse. Un encuentro que parece unirlos. Bella Lombardi es la estrella del ballet, tan sublime y perfecta sobre el escenario, con una c...