Pecado entre paredes

Capitulo 54

Era ya tarde, el alcohol y la música, las personas estaban a todo lo que daba, hombres borrachos, y personas que aún se veían que estaban bien, en cambio yo estaba cansada, y tenía hambre, fui a buscar a mis hermanos, por qué a media fiesta me abandonaron, me levanté y los ví a los lejos y me acerque a ellos.

He disculpen buenas noches–Dije y la mirada de todos los hombres se clavaron en mi.

Que paso Aura.

Quería saber, que a qué hora van servir un aperitivo, o de cenar–Dije y muchos se rieron.

Oigan a la princesita, quiere un aperitivo.

Aura, en estás fiestas no hay de comer, bueno la mayoría no hay comida, la gente viene aquí a tomar, a bailar a hacer tratos.

Se nota que está niña no sabe nada de este negocio.

Oigan, tranquilos que la muchachita está preguntando bien, y claramente no sabe nada de este negocio, por qué ella no es parte de este mundo, además más respeto que es la hija del socio Joaquín–Dijo Montero, poniéndose a mi lado–Asi que le bajan a sus risitas que ella no hizo nada.

Disculpa Aura, si quieres te consigo algo, vamos a la cocina y le decimos a la Nana que te prepare algo si.

Está bien Alfredo, puedo ir yo sola, solo que pensé que como en las anteriores fiestas que han echo han dado no se algo de comer, y pues ya es tarde y pensé que iba a ver, y disculpen pero ustedes no son nadien para venir aquí y burlarse de mí, me verán muy inocente con carita de niña buena pero no soy dejada, bola de inútiles.

Ya oyeron a la dama, bola de mal paridos, venga mi Reyna que yo la acompaño–Dijo Montero.

Nos alejamos de ahí y fuimos hacia la casa, y entramos a la cocina.

Mi niña se le ofrece algo.

Hay Nana, tengo mucha hambre.

Siéntese, ahorita les preparo algo rico.

Gracias Nana.

Oyes fuistes muy valiente ahí afuera con esa bola de mal paridos.

La verdad no sé cómo hice para sacar ese valor, la verdad si soy muy inocente y tonta.

No digas eso, eres alguien muy lista.

Ya quisiera yo, pero dime Montero cuéntame de ti.

Me llamo Rodrigo Montero, soy el jefe del cartel de cali, soy es más poderoso de por haya y por aquí también, tengo la mejor mercancía, y me encata la fiesta las mujeres, pero creo que está ves fue una excepción, soy un hombre muy temido, jota el que nada siempre conmigo es mi mano derecha es como un hermano para mí ese pelado.

Tu vida si que es interesante Rodrigo.

Y tú qué me cuentas.

Pues nada, soy una chica de 18 años, estudio por qué no me gusta mucho este mundo, pero aquí crecí sin darme cuenta, mis padres me ocultaron este mundo por muchos años, hasta que yo me di cuenta de que se dedicaba mi papá, por la televisión.

Dime, la señora Alejandrina es tu mamá.

No, mi mamá es otra persona.

Ya entiendo.

Si, pero pues mi vida es aburrida.

Eh escuchado sobre ti.

Sobre mi.

Si, eres una persona con una mirada muy profunda, me han dicho que vos si te miran esos ojos hacen que cualquier hombre quede convertido en piedra, pero conmigo no.

Ha si, en piedra.

Si, vos eres bella y díga que se lo estoy diciendo yo, que tengo buen gusto en las hembritas, y que no estoy siendo duro con usted, la mayoría soy una persona cerrada no le cuento nada a nadien así como si nada, pero tú me das confianza y me he de escuchár patético, pero eres hermosa vos lo eres.

Sonreí al escuchar las palabras de Rodrigo, es un caballeroso, hasta ahora lo ha sido conmigo, es guapo con dinero y con clase, podrá ser un capo grande de un gran cartel pero es tan educado y su mirada es tan profunda, su cabello sus gestos cada movimiento, era genial, sin duda cualquiera mujer se moriría por estar a su lado, será que es momento de cambiar papeles y dejar a lado mis sentimientos por Iván, por qué está mala por qué es mi hermano y dejarme conocer por este chico misterioso y poderoso, mi mente estaba tan perdida y más por la mirada de Rodrigo Montero, Montero su apellido de por si solo se escuchaba poderoso, es un hombre de porte recto y temible, su acento era muy lindo.

Mija ya está la cena, aquí está.

Gracias Nana.

Te hice tu pasta favorita se que es tu comida favorita.

Gracias Nana te quiero.

Aquí esta joven.

Gracias.

Pues provecho.

Provecho Reyna.

Empezamos a cenar y sentía la mirada pesada y penetrante de Montero sobre mi, sin duda su mirada daba escalofríos, te podías sentir deseada por el, su sonrisa que era completamente seductora y su porte, su rostro, todo sus facciones, mentón clavícula, todas sus facciones son tan marcadas, sus gestos tan expresivos.

Será que me olvidé de Iván y empiece con alguien más...

.....
Volví, perdón por la inactividad.

Espero les guste.

Perdón por los errores de ortografía.

NV las ama 😘🤙🏻