Killing van Thorpe. (#PGP2024) ✔️

14. Mighty Tower

24 de diciembre, 2032
Caitlyn.

Ya se habían llevado el cuerpo para cuando Caitlyn regresó de los baños, pero no habían limpiado la sangre del suelo. No obtendría nada que pudiera ayudarla de parte de Haley, así que dejó de insistirle una respuesta. Su instinto no le permitía dejarse llevar por el terror y la pena, debía seguir indagando hasta que diera con el responsable. Había sido así desde pequeña, y lo seguiría siendo hasta que la curiosidad le terminase cobrando factura. Le había mentido a su padre para ganar más tiempo, para hablar con más gente, pero era cuestión de tiempo para que descubriese la verdad, ¿reaccionaría como el inspector Williams o como su padre?  

No tuvo tiempo de formular una respuesta, al pasar por la habitación donde se llevaban a cabo los interrogatorios vio a unas mujeres llevándose a Timothy en una camilla. Era su culpa. Timothy era asustadizo y débil, y ella se lo había entregado en bandeja de plata a Agnes, que era el diablo hecho carne. No tuvo de otra, hizo lo que debía hacer. ¿Para qué? No pudo sacar nada de Haley, ni una pista. Puede que para estas alturas su padre y Agnes ya supieran que les había mentido para librarse de sus preguntas. 

Para ella era muy importante dar con la verdad, necesitaba un nombre. Durante las últimas semanas había tenido muchos problemas con Caleb, y durante la fiesta había bebido, cuando bebía y mezclaba sus medicación sus recuerdos eran alterados. No tenía muy claro lo que había sucedido horas antes a la tragedia, pero necesitaba saber que ella no había formado parte. La primera vez que casi mató a otra persona la dejó marcada para siempre, si eso hubiera pasado otra vez... no lo superaría.

Cuando regresó a su casa después de estar cautiva por Rafael, le prometió a su padre que no volvería actuar por su cuenta y que serían uno solo. Pero no fue así. Sus promesas se desvanecieron, se debilitaron con el tiempo. 

Se tardó más de lo que había planeado en llegar a la enfermería, al llegar Agnes ya salía de la habitación. Hizo que la ficha del caballo blanco se moviera entre sus dedos antes de entregársela. Caitlyn supo que se encontraba en graves problemas, Timothy había dejado bajar sus defensas; no lo culpaba, Agnes siempre conseguía lo que se proponía. Su madrina le bloqueó la entrada.

—¿Qué quieres?

—Que me digas porque nos has mentido a tu padre y a mí.

—No os he mentido nunca, me ofende tu acusación. Déjame pasar.

—¿Qué se te ha perdido en la enfermería? —la miró con arrogancia—, pensé que tendrías más interés en visitar la morgue, para ver a ese muchachito. Ni siquiera te has permitido llorarle.

—Mi amigo está ahí dentro, ya por los muertos no puedo hacer nada. 

—Eres muy lista, Cat, pero no tanto como crees —jugó con el anillo que tenía en el dedo anular —, algún día tus mentiras te encontrarán, y no serás capaz de lidiar con las consecuencias. Mírame —le ordenó—. Yo te he ensenado todo lo que sabes, no lo intentes conmigo. Ya deberías saber que es mejor estar de mi lado que de mi contra.

—Esta academia ya ha sufrido bastante por una noche —replicó —, deberías marcharte.

—Tu amigo me lo ha dicho todo —su tono era amenazante —. Ese caballo le pertenece a otra persona, Vernon Holloway, ¿por qué mientes? ¿Intentas encubrirlo?

—Vernon es un gilipollas, no arriesgaría mi pellejo por él. 

—Eres buena en esto —aceptó entre risas—. Después de todo, eres mi discípula. Tengo una propuesta para ti, pero tu padre no puede saber.

—Soy toda oídos.

—La policía no podrá permanecer aquí para siempre, el director no nos lo permitirá, pero tú vives aquí, eres perfecta para el trabajo.