Unstable. [Libro 1 > Saga Bernocchi]

capitulo 13

Octubre, 2018.
Londres.
Casa del bosque.

Mis ojos pesan, no soy capaz de abrir o de moverlos pero si siento como me cargan y me trasladan, escucho el ruido de un avión pero me siento tan cansada que me vuelvo a sumergir en la oscuridad profunda que me encontraba...

••••••••••••

Abro los ojos y todo está oscuro, mi pierna ya no duele, estoy en una cama, toco todo al rededor con mis manos pero no siento nada más que sabanas, también siento frío, mucho frío. Quito las sabanas de mi cuerpo y al sentir el frío con más intensidad se me eriza toda la piel.

No escucho nada al mi alrededor, mis pies tocan el suelo hasta siento las texturas de maderas. Comienzo a tantear buscando algo con que alumbrar, toco una mesita de noche la cual tiene una lámpara creo y sigo tanteando hasta que encuentro como encenderla.

La luz es tuene pero puedo ver que hay ventanales, me levanto y  me dirijo hacia ellos abriendo las cortinas y quedando impactada con lo que veo.

Todo es árboles con neblina ¿Donde mierdas estoy?

Sigo abriendo todas las cortinas dándole  luz al cuarto y es muy hermoso el contraste de la madera con el negro, azul y dorado que tiene la habitación.

Me siento en la cama nuevamente tocando mi muslo donde fui herida ayer y lo único que hay es gasa, no siento dolor por más presión que ejerza.

Me detallo y voy vestida de short y una sudadera del mismo color y de la misma textura.

Vuelvo a pasar la vista por toda la habitación de nuevo y es muy hermosa. Miro dos puertas, una para el interior de la casa y la otra tiene que ser para entrar al baño.

Quedo aún más impresionada con el baño cuando entro en el. Todo es de mármol y madera que hace juego con la habitación. Hay un solo ventanal que está en donde se encuentra una tina que no creo que sea tina por lo grande que es, parece un jacuzzi.

Me dirijo hacia la ducha y pienso en la idea de bañarme. No lo he hecho y aunque no huelo mal... Decido bañarme así que comienzo a desnudarme.

Entro a la ducha y abro la primera llave que suelta un agua congelada.

- Que torpe - me regaño y me abrazo el cuerpo.

- Demasiado - hablan y volteo lentamente hacia donde se encuentra la voz... Y ahí esta.

Antonio está ahí, muy tranquilo y muy bien vestido.

carga un pantalón ajustado negro con una camisa azul y varios suéter encima negros, se ve como si fuera salido de una revista.

Se acerca sin quitarme la mirada del cuerpo y trato de taparme más pero el lo único que hace es sonreír mostrando su dentadura perfecta, sus ojos se vuelven más chispeantes.

- Esta es la del agua caliente - vuelve hablar y mete su mano abriendo la ducha nuevamente y tal como lo dice el agua es caliente - Y solo hay que abrir un poco de esta... - dirige su mano hacia la otra sin quitarme la mirada de encima abriendo la otra - Y así tienes un agua perfecta.

Lo veo fijamente y estoy apunto de hablar pero el sale de manera apresurada del baño cerrando la puerta tras el, meto un poco mi pierna y tal como lo había dicho el agua está perfecta.

Me ducho poco a poco sin apuro la gasa se moja pero no importa solo sigo con lo mío y al rato decido que es suficiente.

El frío me golpea erizando todo mi cuerpo de nuevo, encuentro una toalla y me envuelvo en ella, salgo y me trago el grito cuando veo Antonio sentado en la cama con ropa a su lado.