Diciembre, 2018.
Italia.
Castillo Bernocchi.Me remuevo en las sábanas frías de mi cama, me toman por la espalda y siento el pecho definido.
Medio me ve volteo y veo Antonio con una sonrisa, sus ojos brillan y el verde es más intenso que lo normal.
- Buenos días - Susurro y me besa.
Me volteo y lo abrazo, estoy feliz, le doy una sonrisa y me arregla el cabello.
- Me debo ver horrible - Niega pasando las manos por mi cuerpo - ¿Pasa algo?
Vuelve a negar respirando hondo, es raro que no me hable o que no me de sus buenos días, es raro que no lo tenga bien enterrado.
- ¿Te gustaría tener un hijo conmigo? - Lo veo fijamente y no entiendo a qué va esto.
- Ya lo tenemos - Bromeo - Que espero que haya llegado bien.
- Lo hizo - dice viendo mi cabello - Tienes algunas pecas.
- ¿Ahora es que te das cuenta? - Niega y lo siento raro.
- No me has respondido.
- Tal vez - Le digo - ¿Por qué? - me siento encima de él - ¿Quieres practicar?
- Curiosidad - Pasea las manos por mis piernas y las lleva a mi abdomen viéndolo diferente - Nunca has tenido un abdomen plano.
- No encajo en los estándares de Belleza - digo con fingido pesar.
- ¿Que? - me ve sonriendo - Eres perfecta ni siquiera tienes una mancha en la piel.
- Por eso me la voy a tatuar - Digo y niega divertido.
- Los jóvenes y sus cosas - Suelta y rio a carcajadas.
- Cierto que tú eres mi papi - Voy a sus labios.
- Lo soy - Dice con su típica sonrisa de soy lo mejor y lo se.
- Y un viejo también - Gruñe y me rio - ¿Cuando va a dejar de funcionar?
- ¿Que te pasa Isabella? No soy tan viejo.
- Ajá - Respondo - me llevas 12 años... no puede ser - me alejo de golpe - Cuando tuviste a Massimo yo era una bebé.
- Yo era muy joven también - Dice.
- Mmm - comienzo a sacar la cuenta con los dedos.
- No puedo creer que me vaya a casar contigo, no sabes ni sacar una cuenta.
- Joder me hiciste perder - le reclamo y voltea los ojos, comienzo otra vez - ¿Tenías mi edad?
- Deberías tu tener un hijo a esta edad también - dice bajándome cuando toca mi espalda.
- ¿Sabes que me da terror de embarazarme? - niega - Tenerlo - me ve como si hubiera perdido la cabeza - Tu no lo ves así porque a ti no te va a doler, no importa si es cesárea o parir es igual de doloroso.
- Tu no has hecho ni una ni otra - Agarra mi cabello, pongo mis manos en su pecho dejando la quijada encima de ellas.
- ¿Como fue cuando Massimo? - Le pregunto - Nunca hablan de su mamá.
- No estuve ahí - Dice y me pellizca la punta de la nariz.
- ¿Que hacías? ¿Andabas de sicario o como? - sonríe dejando las manos en mi espalda.
- No, estaba ... - Se calla y entrecierro los ojos - Estaba cogiendo.
- Dios mío - se vuelve a reír - ¿No podías dejar de meterte tu pene en un hueco por un día?
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Unstable. [Libro 1 > Saga Bernocchi]
Action¿Este el comienzo o el fin de una historia? ¿Mi historia?