capitulo 50

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Claudia.
Enero, 2019.
New York - Manhattan.

Veo Antonio salir como si lo persiguieran con la mirada perdida, Massimo aprieta mi mano y no entiendo que pasa.

Tres días que Isabella no despierta y es primera vez que lo veo aquí.

Me mando a buscar sin embargo no lo vi, supe de el gracias a las noticias ya que anda quemando edificios y casas acabando con familias de empresarios.

- ¿Que pasó? - Le pregunto al doctor que se rasca la cabeza.

- No lo sé - responde y lo veo preocupada - De alguna forma está pasando a la muerte cerebral - Se nota el cansancio y la verdad desde que estoy aquí se la pasa de aquí allá y en su oficina la vez que fui tenía más de 10 libros gruesos.

- ¿Que quiere decir con eso? - Pregunto y la lagrimas se me salen - ¿Morirá?

- Si - Responde y siento como dejo de respirar - Estamos haciendo lo que ponemos pero.. - El hombre se queda de piedra cuando lo apuntan.

- No lo estás haciendo bien entonces - Avonf lo apunta y la mirada que le da me hace retroceder - Va a entrar y le va a pedir a Dios un puto milagro que la haga abrir los ojos pero de hoy no pasa - Creo por un momento que el hombre se va a desmayar pero sale apurado hacia la derecha.

- ¿Si no se puede hacer nada? - Pregunto y niega.

Se va y yo me quedo con Massimo, paso la vista a Isabella y no me veo sin ella, pongo la mano en el vidrio dejando que las lagrimas bajen por mis mejillas.

El monitor comienza a sonar y de nuevo vuelven los doctores y las enfermeras.

- Esperen - Manda el doctor viéndola y sujeto a Massimo cuando trata de entrar - Está tratando de despertar ¡Traigan los equipos! - Grita y todo pasa tan rápido.

Le revisan los ojos y golpean sus nervios que no se mueven, sigo sin entender una mierda.

- Tal vez se equivocó - Susurra Massimo y yo lo veo negando.

- Ella va a despertar lo se - Me ve y niega - No nos va a dejar lo se.

- ¿Como puedes estar tan segura? - Pregunta y yo me quedo en silencio viendo cómo sus dedos se mueven.

- Solo lo se pequeño - respondo y el doctor vuelve hacer lo mismo.

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Isabella.

La melodía que suelta el violín hace que mis oídos no escuchen más nada. Siento mis pensamientos lejos igual que mis emociones...

- Bambola - escucho su voz lejos paralizándome por completo.

Volteo buscándolo y no lo encuentro, suelto el violín haciendo que se rompa en pedazos haciendo mi corazón acelerarse dejándome en un lugar oscuro.

Camino y no se a donde me voy, muevo mis dedos tratando de sentir algo y no lo siento, necesito encontrarlo pero no veo nada. Tomo asiento en el frío piso y una lágrima sale por mi ojos.

Unstable. [Libro 1 > Saga Bernocchi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora