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Hace unos meses atrás.

—Hay una alta probabilidad de que su pareja sea un lobo alfa. —habló el hombre.

—¿Está seguro doctor? —preguntó la serpiente.

—Es lo que los resultados muestran. —le dio la hoja.

—¿Hay alguna forma de hacer que esa parte despierte? —vio al hombre.

—¿Despertarla? —hablo sorprendido.

—Sí doctor. —dijo. —¿Cómo puedo despertar esa parte?

—¿Por qué desea despertarla? —le pregunto. —no me malinterprete joven Min, lo que trato de decir es que esa parte oculta puede ser muy peligrosa e inestable por algo está oculta.

—Sé que lo puede ser. —contestó la serpiente. —pero sé que esa parte lo puede proteger si en algún momento yo no estoy junto a él.

El hombre asintió y el alfa sonrió, sabía que esa otra parte de Jimin lo podría defender, pues sabía que no todo el tiempo iba a poder estar con su omega.

—Si su omega posee una mitad de lobo. —hablo. —los lobos alfas son muy territoriales en cuanto a sus parejas, un estímulo donde sientan que sus parejas están siendo alejadas de ellos, activan sus sentidos territoriales.

—¿Hay algo más? —pregunto.

—El aroma es muy importante en los alfas de lobo. —respondió el beta. —el mínimo aroma distinto al de su pareja o que no sea el suyo, los vuelve territoriales.

El alfa se puso a pensar y luego vio al beta el cual lo miraba, Yoongi sonrió y agradeció al hombre, ya sabia que hacer porque estaba la coneja y de algo le iba a servir, posibilidades que el lobo le arrancara, la garganta era alta, pero valdría la pena para que Jimin estuviera a salvo y que nadie nunca más le hiciera daño.

[...]

Jimin se subió al auto, iba molesto por lo que vio, su interior le decía que debía de regresar y arrancarle la garganta a esa coneja asquerosa, quería despedazarla, suspiro cansado y luego miro a la ventana y sonrió, si la coneja quería jugar así él también podía hacerlo y sabía cómo hacerlo.

—J. Seph. —dijo.

—Sí, joven Min. —habló.

—Llévame al suburbio 35. —lo vio.

—Es un lugar peligroso. —hablo.

—Estaré bien. —sonrió. —además, tengo que hacer una corta visita.

—Como ordene. —dijo el alfa.

Este condujo al sitio dicho, Jimin miro su celular y al llegar al punto se bajó del auto y le dijo que se quedara en el auto el alfa que le llamaría si algo pasaba, las personas de ahí miraban al chico que iba a paso lento, algunos retroceden al sentir la presencia del alfa que iba en el cuerpo delicado del chico. Jimin miro la foto y luego a una alfa que estaba sentada en el suelo con unas botellas de cerveza, al ver al rubio se asustó, pero luego se rio al verlo.

—Miren lo que hay aquí. —se levantó, pero cayó al suelo por la ebriedad.

—Ahora entiendo por qué ella busca alfas con dinero. —miro detenidamente a la alfa. —eres una patética y acabada alfa borracha que no le da los lujos que ella quiere.

Un pollito llamado Park Jimin [Y.M][#2] [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora