Estúpido error, ¿intencional? [Rinsagi +18]

Parte 18

Tengo sueño.

Tengo hambre y sueño.

Hoy es viernes, en unas horas será fin de semana y yo tengo que visitar a mis padres del otro lado de la ciudad, no es que no esté animado para ir, es que no tengo ganas de ir. Los últimos días han sido de más estresantes, los exámenes se acercan y los profesores nos cargan la mano más de lo que deberían, a mi parecer solo basta con un examen al año y eso estaría bien, no hay por qué alocarnos poniendo uno cada que se les antoja.

También vivo solo, quiero decir, ya no tengo compañero de habitación oficialmente. Sé, (por Aryu) que Rin se ha mudado de la escuela y prefiere venir todos los días que quedarse en los dormitorios, de todos modos tiene auto. Y está bien, no me importa, lo que no sé es por qué no me han asignado un nuevo compañero, aunque no es que quiera, la verdad estar solo es mejor que estar aguantando los ronquidos de alguien. Aunque Rin no roncaba.

Sacudo mi cabeza, tratando de desviar los pensamientos que se agolpan en ella, termino de guardar lo que me falta en la mochila y salgo de la habitación, fuera, Bachira me espera, me agita la mano para que lo vea, voy hacia él y comenzamos a caminar a la salida, donde el auto de papá está esperándonos.
Metemos nuestras cosas a la cajuela y cuando la cierro puedo distinguir el coche de Rin, está aparcado a unos metros de distancia de nosotros, achino los ojos para ver con detenimiento debido a los molestos rayos de sol. Supongo que sus clases han terminado y también irá a casa, entonces Hiori aparece en mi campo de visión, Rin se baja del auto y le ayuda con la mochila, la mete en la cajuela mientras Hiori entra al lugar del copiloto, es una milésima fracción de segundo cuando Rin voltea hacia atrás, hacia mi, nuestras miradas se cruzan y yo la desvío porque no quiero parecer un acosador.

Bachira me ha ganado el lugar al lado de papá y no me queda más que entrar en los asientos traseros, me pongo los audífonos y reproduzco música. No puedo creer que hace unos días me estaba rogando para ser compañeros sexuales y ahora esté con Hiori cuando dijo que solo era un amigo, ¿para qué mentir? ¿Quería estar con los dos, entonces? ¿Nos mentía a los dos?

Dejo de pensar en tonterías cuando el auto de papá se pone en marcha, Bachira mueve las manos y veo que está diciendo algo pero no lo escucho, papá se ríe y asiente, cierro los ojos porque no tengo ganas de socializar, voy todo el camino así hasta que siento que me tocan el hombro, lo primero que veo es a mi amigo fuera del auto, me palmea el hombro, levanto la vista y me doy cuenta de que hemos llegado a casa, bajo del coche, saco las mochilas y vamos adentro, en la sala la televisión está encendida y el olor a comida casera me inunda las fosas nasales, respiro todo lo que puedo de ese olor y voy a dónde mamá, la cocina es su lugar feliz y pues constatar que eso nos hace feliz a papá y a mí. Me mira, me da un beso en la frente y me abraza, dice que me extrañó un montón y luego hace lo mismo con Bachira.

Cuando terminamos de comer, decido que es hora de ir a mi habitación, dejo a Bachira con mis padres, me echo en la cama y comienzo a revisar la redes sociales, no es como que tenga mucho que hacer de todos modos.

Bachira entra a mi habitación poco después, se tira a mi lado en la cama y me muestra su teléfono.

— ¿Qué es eso? — mascullo.

— La fiesta que organiza Aryu, duh. Es esta noche.

Miro el móvil, son las seis de la tarde, la fiesta comienza a las ocho, si decido ir, tendría dos horas para bañarme, decidir qué ropa poner y llegar a la fiesta.

— Paso. — digo al fin.

— ¿Qué? Ya confirmé nuestra asistencia.

Mi amigo me guiña un ojo, se levanta y corre fuera, supongo que se encierra en la habitación de invitados para ducharse o algo así, veo el móvil, me levanto y decido que iré. No puedo estar toda la vida acostado en cama.